Un amigo de la madre de las menores de 2 y 4 años, presuntamente asesinadas por envenenamiento por su padre en Alboloduy (Almería), y la casera de la mujer han coincidido este lunes al denunciar que la justicia no debía haber permitido al hombre, "un maltratador" -que se ha suicidado- un régimen de visitas con las niñas.

"Alina se quejaba porque se llevaba mal con el padre de las niñas. Estaban separados, pero la justicia le había dado a él la posibilidad de verlas. Sabiendo que era violento y un tío con problemas de maltrato, no tenían que haber dejado a las niñas sin acompañante", ha lamentado Costica, un amigo de la madre de las menores fallecidas.

"Todo el pueblo está consternado. En mi opinión, no tenían que haber dejado solas a las niñas, aunque tuviera su derecho a verlas", ha recalcado en declaraciones a los periodistas tras participar en una concentración de repulsa a las puertas del Ayuntamiento de Abla, donde las niñas vivían con su madre desde hacía unos dos años.

"Sabemos que tenía problemas con el padre y que la había amenazado más de una vez. Nosotros ahora vamos a ayudarla y apoyarla como podamos todos juntos", ha asegurado.

En la misma línea, Loli, actual casera de Alina, también ha lamentado que, a pesar de que la mujer se llevaba "mal" con el padre de sus hijas y tenía una orden de alojamiento de ella, llegaba el fin de semana y se las podía llevar: "Eso era lo que no se tenía que permitir", ha denunciado esta vecina, quien vive enfrente y que nunca vio al hombre por la zona.

También ha explicado que Alina, al ver este domingo que las niñas no llegaban a la hora de vuelta, llamó al padre por teléfono y, viendo que no le cogía, se lo dijo al hombre de un bar, quien le dijo a su vez que avisara a la Guardia Civil.

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Tres días de luto

Minuto de silencio por las niñas asesinadas a manos de su padre

A raíz de este crimen por posible envenenamiento, investigado por la Guardia Civil como presunta violencia vicaria como principal hipótesis, los Ayuntamientos de Abla y de Alboloduy han decretado tres días de luto oficial.

Varias decenas de vecinos se han concentrado, junto a miembros de la corporación, a partir de la 13.00 a las puertas del Consistorio de Abla, donde se ha dado lectura a un manifiesto y se ha guardado un minuto de silencio roto por los aplausos de los congregados.

Posteriormente, algunos vecinos también han llevado y depositado flores en el centro educativo donde estaba escolarizada una de las dos menores fallecidas.

Según Javier Sánchez, alcalde de Abla, la madre se encuentra "en estado de shock" y cuenta con ayuda de los servicios sociales.

"Ella vino sola con sus dos hijas menores hace unos dos años, huyendo del padre de las niñas. Somos una comunidad pequeña pero estaba totalmente integrada, tranquila, con su trabajo de vez en cuando en un bar y sus niñas", ha declarado a los periodistas.

Por su parte, la alcaldesa de Alboloduy, en otra atención a medios, ha lamentado igualmente el terrible suceso y ha apuntado a que habrá que analizar "qué ha fallado para que no vuelva a pasar".

Según la regidora, el padre de las niñas vivía en un cortijo tras la separación de la pareja y en este pueblo sabían poco de él.