Marlaska, sobre las protestas en Ferraz: "No quiero fascistas para mi país"
Rufián ha recriminado al ministro de Interior de ser unos "cobardes" antes los manifestantes "fascistas brazo en alto" frente a la sede el PSOE.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha defendido la actuación de la Policía en las protestas contra la amnistía junto a la sede del PSOE, en la madrileña calle de Ferraz, y ha lamentado que entre las personas allí concentradas haya habido "fascistas": "No quiero para mi país fascistas".
De esta forma se ha pronunciado este miércoles el ministro en la sesión de control al Gobierno en el pleno del Congreso al ser preguntado sobre estas protestas por el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, que les ha acusado de ser "cobardes" frente a unas manifestaciones "de fascistas brazo en alto" y de que hayan quedado "impunes".
Tras mostrarle diversas fotografías de esas protestas con "fascistas brazo en alto", cruces gamadas nazis, "asquerosos misóginos" con muñecas hinchables o "la Pasionaria de la ultraderecha" cortando una calle (en referencia a Esperanza Aguirre), Rufián ha exigido al ministro que "no sean tan cobardes, que sean duros con esta gente".
"No hay impunidad", ha rebatido Marlaska, que ha asegurado que en el momento en el que estas protestas han "invadido" la legalidad las fuerzas de seguridad, en este caso la Policía Nacional, han actuado "garantizando siempre la seguridad del conjunto de la sociedad, el ejercicio de los derechos por todos los ciudadanos y siempre bajo criterios de legalidad y proporcionalidad".
Así, ha detallado, ha habido 78 detenidos por la comisión de supuestos delitos y 1.978 identificados por cometer presuntamente infracciones administrativas, incluido portar determinados símbolos en determinadas circunstancias.
También ha recordado que las concentraciones se han saldado con 52 heridos -50 de ellos policías-, que la mayoría no han sido comunicadas y que la actuación policial ha seguido siempre los principios de "congruencia, oportunidad y proporcionalidad".
El ministro ha explicado que a partir del día 6 de noviembre, fecha en la que la Policía cargó por primera vez contra manifestantes violentos, el perfil de los concentrados más próximos al cordón policial "cambió".
"Eran jóvenes con el rostro tapado y estética ultra", ha enfatizado Marlaska, antes de relatar que su modus operandi fue cortar las bridas del vallado policial y gritar "consignas y cánticos racistas y fascistas e insultar de forma denigrante a la Policía Nacional", además de lanzar botellas y otros objetos contra los agentes.
Ha enumerado algunos de los objetos incautados a los manifestantes como palos de madera, barras extensibles, una escalera, bengalas, tracas, dos mástiles de casi tres metros, una pistola, spray pimienta y seis bastones de esquí. "Muy normal acudir a una concentración pacífica con bastones de esquí", ha ironizado antes de arremeter contra el PP por "sumarse al coro" de quienes quieren denigrar la labor de los policías.
"No se equivoquen de adversario, no vengan al Congreso a poner en entredicho la labor de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, que desempeñan su tarea de manera exquisita y ejemplar. En todo caso, centren sus esfuerzos en desenmascarar a todos aquellos que, en nombre de la democracia, no pretenden más que socavar y erosionar sus cimientos", ha instado Marlaska.
Y ha apostillado: "Dejen de intentar politizar la labor de nuestros agentes. Dejen de una vez de intentar instrumentalizar todas las instituciones del Estado en su propio beneficio".
"Nuestra Constitución no es militante, no exige a ningún partido político su defensa, simplemente establece que para defender sus intereses no utilicen la violencia, la discriminación, el odio. Y en eso estamos todos. Pero le repito, ¿qué me parecen las fotos que usted me ha enseñado de parte de los concentrados en esas manifestaciones? Fascistas y no quiero para mi país fascistas", ha concluido Marlaska.
El ministro ha concluido su intervención felicitando a los agentes que han garantizado los derechos y libertades en estas concentraciones desde el pasado 3 de noviembre. "Sus intervenciones han sido en todo momento profesionales, diligentes y proporcionales", ha zanjado.
