¿Guardias civiles virtuales para la España vaciada?

Interior plantea hacer frente a la falta de agentes reales con avatares superrealistas entrenados por inteligencia artificial.

Imagen de archivo de un agente de la Guardia Civil.
Imagen de archivo de un agente de la Guardia Civil.
GUARDIA CIVIL

Puede que en un futuro no demasiado lejano, la patrulla de la Guardia Civil que ahora llega a un pueblo casi deshabitado para atender a un ciudadano sea sustituida por una pantalla en la que aparezca un agente virtual tan de verdad que llevaría su tricornio siempre bien puesto y su uniforme pulcrísimo, como mandan los cánones del Instituto Armado. La idea, que parece una adaptación de una película de ciencia ficción norteamericana a la idiosincrasia española, está más cerca después de que el Ministerio del Interior haya publicado en el BOE una licitación, por valor de 499.846,79 euros, para desarrollar un plan basado en la "creación artificial de avatares súper-realistas con la imagen corporativa de la Guardia Civil".

Según el documento de Interior, los nuevos agentes virtuales estarían entrenados mediante inteligencia artificial, se integrarían en una interfaz de lenguaje natural diseñada para pantallas interactivas y se desplegarían por la España vaciada para de esta forma hacer frente a un doble reto. Primero, que el servicio a quienes viven en los pueblos que pierden población siga siendo el adecuado; pero también, suplir la falta de agentes reales, que podrían destinarse a otras tareas.

En la memoria justificativa, el departamento de Fernando Grande-Marlaska incide en que el 'Piloto Guardia Civil Virtual', que así se llama el proyecto, se encuentra solo en la primera fase, que se extenderá entre los años 2024 y 2026, en la que busca evaluar su viabilidad. Pero si sigue adelante, la imagen que podría extenderse por los pueblos más pequeños puede ser la de un tótem con una pantalla integrada en la que apareciera un guardia civil que podría hablar con total normalidad con su interlocutor.

Para esta etapa inicial, Interior quiere hacerse con un servicio de computación y de almacenamiento en la Nube del modelo SPI (SaaS, PaaS, IaaS) que unifique tecnologías de IA (Inteligencia Artificial), motor de aprendizaje (Machine Learning), motor de empatía y de capacidad de lenguaje (PLN), reconocimiento de voz (Text to Speech to Text) y modelado de dos avatares superrealistas con interfaz de lenguaje natural e imagen corporativa de la Guardia Civil. También solicita a los proveedores el suministro de elementos hardware para la interacción con humanos compuestos por diez totems de pantalla interactiva y un expositor holográfico.

"En este escenario de recursos limitados y dispersos es prioritario potenciar el desarrollo e implementación de nuevas tecnologías que permitan proporcionar una respuesta más eficiente y mejorar las condiciones de prestación del servicio a la ciudadanía, con independencia de su formación en competencias digitales", resume el documento.

Primeras críticas

Pero el proyecto ya ha recibido las primeras críticas. La Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) rechaza esta medida "como sustitución a la presencia física de los agentes de la Guardia Civil y de las unidades, sobre todo en la España Vaciada". "Estaremos muy atentos a esta implantación porque no vamos a permitir que se intente, por parte del Ministerio del Interior, suplir la presencia policial física a favor de que sea la inteligencia artificial la que atienda a las demandas de la seguridad ciudadana", advierte esta entidad.

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