Rechazan suspender la causa contra un exjefe de ETA por el crimen de Giménez Abad
El tribunal asume que tendrá que cursar una Orden Europea de Detención a Francia, donde el exjefe de ETA cumple cadena perpetua, para que autorice su entrega y pueda ser juzgado.
La Audiencia Nacional ha rechazado suspender el procedimiento que sentará en el banquillo al exjefe de ETA Mikel Kabikoitz Carrera Sarobe, alias ATA, junto a Miren Itxaso Zaldúa por el asesinato en mayo de 2001 del presidente del PP de Aragón y senador Manuel Giménez Abad, y ha anunciado que pedirá a Francia su entrega temporal en el momento en el que fije la fecha del juicio.
El tribunal asume que, como sostiene la defensa de Carrera Sarobe y solicitó expresamente la Fiscalía, tendrá que cursar una Orden Europea de Detención (OEDE) a Francia, donde el exjefe de ETA cumple cadena perpetua, para que autorice su entrega y pueda ser juzgado, si bien antes debe fijar la fecha del juicio.
Y para hacerlo, explica el tribunal en un auto, al que ha tenido acceso EFE, debe conocer las pruebas propuestas por cada una de las partes, de modo que insta a los abogados de Carrera Sarobe a que presenten su escrito de defensa.
De esta forma deniega la sección primera de lo Penal suspender el procedimiento, como pidió la defensa del acusado durante la vista celebrada el pasado viernes, en la que mantuvo el rechazo a que el exjefe de ETA fuese juzgado por este atentado hasta que Francia autorizase la entrega.
Según explica el tribunal en su auto, el juez instructor de este atentado, por el que la Fiscalía pide para ambos acusados una condena de 30 años de cárcel, ya emitió en 2015 una OED para practicar una serie de diligencias.
Al no recibir respuesta de Francia durante la instrucción, reabierta al identificar el hijo de Giménez Abad, que le acompañaba cuando se produjo el crimen, a Ata como su asesino, el juez cursó una comisión rogatoria, que fue supervisada por un magistrado francés, para interrogar al exjefe de ETA en Francia y practicar allí una rueda de reconocimiento.
La Sala precisa que el juez instructor nunca solicitó a las autoridades galas la entrega del exjefe de ETA para ser enjuiciado porque no tiene competencia para juzgarle, sino que es este tribunal el que "deberá solicitar" la entrega temporal y lo hará, dice, cuando se concrete la fecha del juicio.
El ministerio fiscal acusa a Carrera Sarobe y a Zaldúa de un delito de asesinato terrorista con la agravante de alevosía y, además de la pena de prisión, pide al tribunal que les prohíba aproximarse a menos de un kilómetro de la ciudad de Zaragoza durante cinco años.
El atentado ocurrió la tarde del 6 de mayo de 2001, cuando el entonces presidente del PP de Aragón se dirigía junto a su hijo al estadio de La Romareda para ver un partido. Cuando caminaban por la calle Princesa, relata la Fiscalía en su escrito de conclusiones provisionales, "Mikel Carrera Sarobe se aproximó a ellos y disparó por la espalda y a bocajarro" a la víctima, "y continuó disparando mientras caía y cuando ya se encontraba tirado en el suelo", en presencia de su hijo, entonces menor de edad.
Después, continúa el ministerio fiscal, tanto él como Zaldúa huyeron.
A ambos les ubica aquel año en el denominado comando Basajaun de ETA, y les acusa de diseñar y ejecutar concertadamente el asesinato del senador popular. Tanto la acusación particular que ejerce la familia de la víctima como la asociación de víctimas Dignidad y Justicia, por su parte, solicitan la misma pena de cárcel para los acusados que la reclamada por la Fiscalía.
