Un policía: "Si el coche bomba de ETA en Goya explota antes yo no estaría aquí"
La Audiencia Nacional ha iniciado este martes el juicio al exjefe de la banda terrorista Gorka Palacios Alday, para quien el fiscal pide 316 años de prisión por su participación en el atentado.
Uno de los policías que se personaron la noche del 11 de mayo de 2001 en la calle de Goya de Madrid tras el aviso por ETA de la colocación de un coche bomba ha testificado en el juicio: "Cuando llegamos, nos explotó a 60 metros; si hubiéramos ido más rápido, yo no estaría hoy aquí".
La Audiencia Nacional ha iniciado este martes el juicio al exjefe de la banda terrorista Gorka Palacios Alday, para quien el fiscal pide 316 años de prisión por su participación en el atentado, cometido frente a una sucursal del BBVA situada en el número 14 de la céntrica calle de Goya de la capital madrileña, que causó más de una decena de heridos y cuantiosos daños en edificios y vehículos.
Gorka Palacios, que se ha acogido a su derecho a no prestar declaración, ya fue condenado en Francia por su pertenencia a ETA y tras ser entregado a España se le impusieron en 2010 83 años de cárcel por el atentado cometido el 10 de julio de 2001 frente a la delegación del Ministerio de Justicia en la calle de Ocaña de Madrid en el que murió un policía nacional.
En marzo del año pasado fue condenado a otros seis años de prisión en relación con las armas y explosivos que el comando Larrano guardaba en un piso de Durango (Vizcaya) y que estallaron en julio de 1997.
En la vista han testificado dos ex miembros del comando que actuaba en Madrid en la época del atentado de la calle de Goya, los ya condenados Aitor García Aliaga y Belén Egües Gurruchaga.
El primero ha asegurado que él no participó en el atentado de la calle de Goya y que solo coincidió unos días con Gorka Palacios cuando llegó a Madrid mientras buscaba casa.
Por su parte Belén Egües ha dicho que no recuerda si Gorka Palacios participó en este atentado.
Uno de los policías nacionales que se personó en el lugar ha relatado que sobre las doce menos diez de la noche les comunicaron que se había recibido una llamada anónima en nombre de ETA avisando de la colocación de un coche bomba en la calle de Goya que iba a hacer explosión a las doce de la noche.
"A las doce en punto nos explotó el coche bomba cuando estábamos a unos 60 metros gracias a dios porque si hubiéramos ido más rápido no estaría yo aquí", ha manifestado el agente.
Ha recordado que vio a un vigilante del BBVA entre los escombros de la sucursal bancaria y a otro tendido en la acera y que pensaba que había fallecido, así como a una mujer "muy asustada" que iba caminando por el medio de la calle.
El testigo ha añadido que la explosión hizo que reventaran los cristales de coches y ventanas y causó grandes destrozos en comercios.
De hecho un técnico especialista en desactivación de explosivos (Tedax) de la Policía Nacional le indicó que él y su compañero se salvaron porque llevaban los cristales del coche policial bajados.
Otro policía ha explicado que desde el aviso de ETA hasta la explosión pasarían unos quince minutos y que los terroristas ubicaron el coche bomba en la calle de Goya pero sin concretar en qué punto de un "abanico de calles desde Conde de Peñalver hasta Serrano, unas cuatro o cinco manzanas, y explotó de forma muy violenta cuando estábamos en la esquina de Velázquez, a unos 60 metros".
