Otras votaciones polémicas en el Congreso: ni Sánchez ni Rajoy se libran
El voto afirmativo del diputado del PP Alberto Casero permitió sacar adelante la reforma laboral del Gobierno y ha generado un intenso debate parlamentario.
Errar es humano y los diputados del Congreso no se salvan de desaciertos que, en ocasiones, son muy relevantes y sonados. Es lo que ha ocurrido en el caso del polémico voto del popular Alberto Casero, número dos del secretario general del PP, Teodoro García Egea, que este jueves por la noche permitió la aprobación in extremis de la reforma laboral del Gobierno.
¿Fue un error personal o un fallo informático? Por ahora no hay respuesta clara.
El voto telemático disponible en el Congreso de los Diputados obliga a un procedimiento de doble verificación antes de darse por válido. La aplicación pregunta al diputado si está seguro del sentido de su voto y le permite alterarlo. Pero una vez confirmado, no hay vuelta atrás. Simplemente, se genera un 'pdf' que sirve como resguardo.
Casero, además de en la reforma laboral, falló en otras dos votaciones durante el pleno celebrado este jueves. El PP considera que de debió a un error en la aplicación y al aceptarse lo ocurrido se produce un "fraude democrático" porque, a sabiendas de que había una "anomalía", la votación siguió adelante.
No es la primera vez
Fuera un fallo humano o informático, lo cierto es que no es la primera vez que algo así ocurre en el Congreso, aunque no con la misma relevancia. Ni el presidente Pedro Sánchez, que este jueves celebraba como un triunfo el error del PP, se ha salvado de cometer algún lapsus. Cabe recordar que en 2015, cuando formaba parte de la oposición, votó a favor de la ley del aborto del Partido Popular al pulsar el botón equivocado.
Algo parecido le pasó a Mariano Rajoy cuando era presidente del Gobierno en 2017 y votó 'no' a sus propios presupuestos. Y el exvicepresidente y antiguo líder de Podemos, Pablo Iglesias, también votó por error dos veces a favor de las cuentas de Rajoy, pese a haberse manifestado en contra.
Aunque en este caso fue diferente y se permitió una rectificación, también se equivocó el diputado del PP por Zaragoza Eloy Suárez durante la votación a la moción de censura del PSOE contra Mariano Rajoy en 2018. El aragonés votó "sí" a viva voz ante el estupor de sus compañeros pero quedó claro que fue un error y se pudo subsanar sobre la marcha para dar su no a Pedro Sánchez, por lo que todo quedó en una anécdota sin consecuencias.
También el exministro José Luis Ábalos se confundió el año pasado y acabó sin votar al polémico magistrado Enrique Arnaldo al Tribunal Constitucional en contra del criterio de su partido, el PSOE. Ábalos explicó entonces que había escrito los nombres en la papeleta telemática, pero, cuando dio a votar, "salió blanco".
Entre otros errores sonados está el de Soraya Sáenz de Santamaria, reprobando a su compañero en el Consejo de Ministros, José Ignacio Wert, cuando este era titular de Educación.
¿Se puede repetir la votación?
No todos estos errores han tenido la misma relevancia. El de este jueves permitió sacar adelante el proyecto con el que el Gobierno quería enmendar la anterior reforma laboral del PP. Por los que los populares piden que no se contabilice el voto de Casero.
El PP subraya que, al margen de que el problema fuese o no de carácter técnico, se ha "quebrantado el derecho a voto" del parlamentario porque la Mesa del Congreso no se reunió para decidir si el voto se podía anular para que fuese emitido de forma presencial.
El partido quiere que se rectifique lo ocurrido porque consideran que se ha alterado la voluntad de la Cámara.
Sin embargo, el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, ha pedido que se acepte el resultado y ha asegurado que "no hay ningún precedente" de que se haya repetido una votación en una situación similar.
"Hay docenas de errores en las votaciones cada semana (...). Si cada vez que se equivoca alguien en una votación hay que repetirla, los diputados no harían otra cosa, estarían repitiendo votaciones continuamente", ha comentado.
Tras señalar que es algo que "ha ocurrido siempre", el también ministro de Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática ha añadido que "cuando uno se equivoca no hay una segunda oportunidad para nadie".
