El detenido por el crimen del niño de Lardero será trasladado de prisión para garantizar su seguridad

Instituciones Penitenciarias busca prevenir posibles conflictos en la prisión riojana debido a la escalada de tensión.

Pasa a disposición judicial el detenido por el crimen del niño en Lardero
Francisco Javier Almeida custodiado por la Guardia Civil
Javier Belver

Francisco Javier Almeida, el presunto homicida de Lardero, ingresará en el centro penitenciario de Segovia, según informó la Subdelegación del Gobierno de la localidad castellanoleonesa. Su traslado desde la cárcel de Logroño responde sobre todo a razones de seguridad debido a la escalada de tensión que desencadenó el trágico suceso. Instituciones Penitenciarias ha ordenado el cambio para poner kilómetros de por medio con el fin de prevenir conflictos en la prisión logroñesa y salvaguardar la integridad del preso ante posibles ataques por parte de otros reclusos.

De momento, se desconoce cuándo se procederá a conducir a Almeida desde la capital riojana, en cuyo centro penitenciario se encuentra desde que el Juzgado de Instrucción número 2 levantara el secreto de sumario y le enviara a prisión sin fianza.

Actualmente, el presunto homicida permanece aislado en el módulo nueve de la cárcel, donde deberá completar una cuarentena de diez días por las medidas sanitarias anticovid. De igual manera, también se le ha aplicado el protocolo de prevención de suicidios y cuenta con la vigilancia de otro interno las 24 horas del día.

En las últimas horas, el detenido por el crimen de Lardero ha pedido entrevistarse en el centro penitenciario con todos los profesionales de la prisión, es decir, trabajadora social, educador, juristas, además del sacerdote. Así lo ha solicitado por medio de instancias en las que no es necesario reflejar los motivos por los que se pide la entrevista.

Estudio de las huellas

De otro lado, las labores de investigación sobre el caso de la mujer de 56 años hallada muerta en su domicilio del barrio logroñés de Los Lirios en octubre de 2020, reactivadas a raíz del crimen de Lardero, han dado un importante paso a raíz del cotejo de una huella sin identificar hallada en el lugar de los hechos. Se ha comparado con la de Francisco Javier Almeida, el presunto autor del homicidio del pequeño Álex y condenado a 30 años de cárcel por un crimen anterior, el de una agente inmobiliaria de 26 años en 1998.

La huella no se corresponde con la de Almeida, por lo que la principal hipótesis sigue apuntando a un asesinato de violencia de género por el que el marido de la víctima se encuentra en libertad provisional. Aunque la juez que investiga el caso no había solicitado ese cotejo de huellas, la Policía decidió hacerlo para avanzar en su investigación.

El crimen de la mujer, en principio atribuido por los forenses a un suicidio y que no saltó a la luz pública hasta este miércoles, sucedió en Logroño el 13 de octubre del año pasado. Ese día, la víctima apareció muerta en su domicilio en la capital riojana, en el barrio de Los Lirios, seis meses después de que el detenido por el crimen de Lardero fuera puesto en libertad condicional.

Dado que las heridas de arma blanca, los golpes recibidos por la mujer y el hecho de que pudo ser agredida sexualmente 'post mortem' o mientras agonizaba recordaban al 'modus operandi' del 'crimen de la inmobiliaria', la Policía abrió una nueva línea de investigación por si pudiera estar relacionado con Almeida.

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