La nueva delegada del Gobierno en Aragón, Rosa Serrano, ha fijado la lucha contra la violencia machista como "prioritaria", así como el equilibrio territorial y la colaboración entre diferentes administraciones.

Así lo ha manifestado en su toma de posesión en un acto que ha estado presidido por su predecesora y actual ministra de Educación y Formación Profesional, Pilar Alegría, para la que era su primera intervención pública como miembro del Gobierno.

Al acto también han acudido los alcaldes de Zaragoza, Jorge Azcón, Huesca, Luis Felipe, el vicepresidente de Aragón, Arturo Aliaga, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Aragón, Manuel Bellido, y otras autoridades civiles y militares.

Serrano, hasta ahora senadora y concejala delegada de Servicios Sociales e Igualdad en el Ayuntamiento de Huesca, ha agradecido su confianza al presidente, Pedro Sánchez, y al equipo con el que ha compartido gobierno en la capital altoaragonesa, donde se ha sentido muy "arropada".

Toma de posesión de Rosa Serrano como nueva delegada del Gobierno en Aragón

Recuerdo a Luis Felipe

Se ha detenido especialmente en la figura de Luis Felipe, con quien es "muy fácil trabajar", porque "gobierna para todos", es "conciliador", "sencillo" y "encarna lo mejor del municipalismo".

En su discurso, ha constatado los avances "sin precedentes" que ha experimentado la mujer y el conjunto de la ciudadanía en este siglo, pero ha recalcado que no es suficiente cuando dos aragonesas -Katia y Hasna- han sido asesinadas en lo que va de año por sus parejas o exparejas.

Así, la delegada del Gobierno en Aragón se ha comprometido a reforzar al máximo todo los recursos que puedan poner en marcha las Administraciones Públicas para proteger a las víctimas de la violencia machista y ha reconocido la labor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y de las policías locales en esta materia.

A ello ha sumado a las Fuerzas Armadas como "máximos aliados" en la garantía de libertad y orden y ha resaltado su "insustituible" labor durante la pandemia.

Por otro lado, Serrano ha apostado por incentivar la vida en los pueblos para recuperar el equilibrio territorial y hacer efectiva la libertad de poder elegir libremente dónde vivir.

Vivienda, empleo y conectividad son cuestiones clave en esta materia, así como el papel del sector primario y de la industria de transformación agroalimentaria, por su peso en el PIB aragonés y porque posibilita que amplias zonas de la comunidad autónomas sigan vivas.

Ha tenido unas palabras también para las familias afectadas por las consecuencias de la covid-19, tanto en el ámbito de la salud como en el del empleo, y ha hecho una mención especial a los mayores, que han sido los más golpeados por el virus.

Afortunadamente, ha continuado, "empezamos a ver el final del túnel", pese a la última ola de contagios, gracias a que la vacunación está siendo "todo un éxito".

Del mismo modo, Serrano ha adelantado que seguirá la labor de su antecesora y colaborará con el resto de administraciones, con mención especial al Gobierno de Aragón, además de con todos los ayuntamientos de la comunidad.

Unos ayuntamientos, ha asegurado, que han sido "trinchera" contra la covid-19, que han sostenido los servicios públicos básicos en momentos de "enorme incertidumbre" y a los que va a dar voz ante el Gobierno nacional.

Todo ello con el consenso como mejor forma de buscar soluciones para una sociedad que ha demostrado "sensatez" en los últimos meses, en un momento en el que la ocupación ha crecido en casi 500.000 personas en el segundo trimestre, según la Encuesta de Población Activa, en el que se están incorporando al mercado laboral el 90 por ciento de los trabajadores en ERTE y en el que el empleo femenino comienza a coger impulso.

Pilar Alegría, por su parte, ha remarcado que la "trayectoria", "capacidad de trabajo", "honestidad" y "sensibilidad social" de Serrano van a ser suficientes en su nuevo cargo y, además, va a contar con un "magnífico equipo" que se lo hicieron "mucho más fácil" en el año y medio en el que ocupó el cargo, marcado por la pandemia.

En su primer acto público, la nueva ministra de Educación y Formación Profesional ha señalado que es el momento de trabajar con determinación en la recuperación y transformación del país, con una gestión eficaz del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

Este plan, ha proseguido, será una palanca para trabajar en una senda diferente marcada por la transformación digital, la ecológica, el fortalecimiento de la cohesión territorial y la igualdad de género, que no son "cuestiones vacías", sino que con ellas "nos jugamos -ha dicho- la España que vamos a ver los próximos años".

Entre esas palancas, las principales son la educación y la formación, basadas en la igualdad de oportunidades y en que todos los ciudadanos tengan las competencias para afrontar el futuro inmediato con garantías de éxito.

Entre los retos, Alegría ha destacado que es necesario "el talento de todos" y, sobre todo, la unidad.

En ese sentido, ha apuntado que Aragón es una "pieza clave" porque ha demostrado cómo se puede salir de esta crisis con una "hoja de ruta clara" y convirtiéndose en una comunidad "puntera" en distintos sectores.

"El lenguaje de colaboración y pacto en esta tierra se entiende muy bien", ha remarcado Alegría, quien ha concluido expresando el "doble honor" que supone para ella, por un lado, ser ministra y, por otro, ser la primera mujer aragonesa en serlo.