Por
  • Cristina Pérez Galán

Intrafamiliar

Concentración en Zaragoza contra la violencia de género.
Concentración en Zaragoza contra la violencia de género.
Guillermo Mestre

En política no es común dar apoyos a cambio de nada. El de Manuel Valls a Ada Colau, alcaldesa de Barcelona, está por determinar si será tan gratuito como parece. De momento, a Valls le ha costado el apoyo de su partido, pero son necesarios meses de ejercicio para verificar la naturaleza de un acuerdo que, de momento, parece una excepción a nivel nacional.

En Andalucía, donde los partidos de derecha y ultraderecha empezaron aparentemente igual, con Vox apoyando un gobierno a cambio de nada, la propuesta empieza a agrietarse y a dejar ver sus costuras. Las consecuencias de que un partido sea determinante para el gobierno de una Comunidad se han traducido en una modificación de los presupuestos autonómicos, en los que los tres partidos han acordado cambios y reformas de marcado contenido ideológico. Entre ellos, a petición de la formación ultraderechista, se ha incluido una partida para la llamada violencia intrafamiliar, un término que no recoge la complejidad del problema de la violencia de género, una de las muestras de la desigualdad estructural femenina. Es fundamental nombrar la realidad que nos rodea, porque de lo contrario, desaparece. Y las más de 1.000 mujeres muertas no merecen eso.

Esperemos al menos que lo ocurrido en Andalucía nos sirva de aviso para todos aquellos gobiernos como el de Zaragoza, en el que se ha dado poder a esta formación a cambio, nos dicen, de nada. Lo ocurrido nos demuestra que es muy difícil que, a la larga, vaya a ser así.

Cristina Pérez Galán es historiadora y periodista

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión