Es primordial aumentar los recursos en salud

La sostenibilidad es imprescindible y los pacientes deben colaborar.

La sanidad pública española está considerada como una de las mejores del mundo, el Sistema Nacional de Salud es patrimonio de todos y debemos preservarlo de cualquier coyuntura que pueda producirse.

Los recortes en los presupuestos de los últimos años han supuesto un deterioro de los servicios, con perjuicio para pacientes y profesionales. Es primordial aumentar los recursos destinados a salud en el próximo año y siguientes para recuperar lo perdido y alcanzar al menos la media que invierten los países de nuestro entorno. La sanidad debe volver a ser universal y sin copagos.

La sostenibilidad del sistema sanitario es imprescindible, los pacientes debemos colaborar a ello mediante una adecuada formación, hábitos de vida saludables, demandar solo los servicios precisos y de forma racional, realizar los autocuidados necesarios, seguir las recomendaciones de los profesionales, tomar conciencia del coste y de la limitación de recursos. Los profesionales tienen en su mano medidas de uso racional, que con una buena relación médico paciente pueden tomar con facilidad. La Administración, como responsable de distribuir los recursos de todos, debe dotar con suficiencia al sistema sanitario y exigir que profesionales y pacientes los usemos con responsabilidad.

En Aragón, además de los aspectos comunes a toda España, como la dificultad de dotación de profesionales, listas de espera, saturaciones periódicas en urgencias, creciente gasto farmacéutico, hay que añadir otros como infraestructuras, despoblación en un medio rural extenso, envejecimiento que conlleva mayor cronicidad y necesidad de servicios sociales. En la financiación de las comunidades deben tenerse en cuenta las peculiaridades de Aragón para que la equidad sanitaria nacional sea real.

En infraestructuras esperamos que en 2018 se avance en los nuevos hospitales, se adecúen los centros de salud a la población y territorio, se mejore el transporte sanitario, se invierta en accesibilidad para que todas las personas, tengan o no algún tipo de discapacidad, puedan acceder a todos los servicios, se dote a los centros de medios y equitativamente distribuidos.

Seguimos echando en falta una coordinación eficaz entre los distintos niveles de atención, distintos profesionales y especialmente con servicios sociales, ya que el bienestar social forma parte de la salud. Pedimos un plan y normativa al respecto.

Es una petición reiterada que Atención Primaria sea potenciada, y con mayor capacidad para diagnosticar y tratar. Cada vez toma mayor importancia la atención domiciliaria para una sanidad de calidad. Debe avanzar el uso de tecnologías para citas, resultados, telemedicina, interconsultas, etc.

Esperamos que se cumplan los plazos legales de asistencia, se realicen las consultas de acto único, se generalice el programa de pacientes crónicos, se mejore el confort en los hospitales, se materialicen planes de salud mental, paliativos, salud bucodental, programas preventivos.

Esperamos que 2018 sea el año en que los profesionales añadan a su buen trabajo técnico un esfuerzo en la formación de los pacientes, un plus en humanización, la consideración del derecho de autonomía del enfermo para conseguir que, tras una información comprensible y adecuada a cada persona, la relación sea de confianza, mutuo respeto, corresponsabilidad y toma de decisiones compartidas.

La participación de las asociaciones de pacientes es beneficiosa y debe ser convenientemente regulada, incluido el reconocimiento del valor aportado al desarrollo científico, preservando la seguridad por encima de todo.

Que 2018 sea el año de la interoperabilidad de la tarjeta sanitaria a nivel nacional, prestaciones equitativas e historia clínica única. Los pacientes exigimos que se conozcan y respeten nuestros derechos, a la vez que nos comprometemos a cumplir con nuestros deberes.