Candela, siete años encerrada en una terraza y desnutrida

Su propietaria, una mujer de 56 años, ha sido detenida como presunta responsable de maltrato animal.

Candela
Candela, siete años encerrada en una terraza y desnutrida
Policía Nacional

Desnutrida, enferma y encerrada en una terraza de la localidad malagueña de Vélez-Málaga. Así se encontraron agentes de la Policía Nacional a Candela, una rottweiler  dócil y cooperadora en grave estado de desnutrición y con severos problemas de salud.

Fue un ciudadano el que alertó del abandono y grave estado de salud en que se hallaba el animal, que fue inmediatamente trasladado a una clínica veterinaria donde fue asistida. La perra se recupera poco a poco gracias a los cuidados de una protectora de Almuñécar (Granada) en la que se encuentra acogida a la espera de una familia que la adopte.

La investigación policial se inició el pasado 8 de noviembre tras la llamada de un ciudadano a la Sala del 091 en la que alertaba de la situación de abandono y grave estado de salud --erosiones en la piel, problemas de visión y falta de tono muscular-- en la que se encontraba Candela. Su propietaria, una mujer de 56 años, la mantenía encerrada desde hace siete años en la terraza a base de bolsas de pan duro. Finalmente, los agentes la han detenido como presunta responsable de un delito de maltrato animal.

Con el fin de comprobar la veracidad de la información de la llamada, se desplazó al lugar una dotación policial. A su llegada encontraron a Candela con sus muy marcadas costillas y huesos de las caderas, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado.

Según el informe veterinario, además de desnutrición --pesaba 23 kilos cuando su peso debería de ser alrededor de 42-- y falta de cuidados profilácticos, padecía de 'leishmaniasis', una enfermedad que no detectada y tratada puede causar la muerte del perro.

La perrita, que presentaba un cuadro grave de enfermedad en la piel de origen alérgico, por falta de tratamiento había adoptado una conducta recurrente y neurótica de autolesión. Igualmente, sufría una enfermedad ocular bilateral de sencillo diagnóstico y tratamiento con una evolución que podría ocasionar ceguera.

Esta investigación policial ha sido remitida al Juzgado de Instrucción número cuatro de Vélez-Málaga (Málaga).

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