El cuerpo carbonizado de Pedro Rodríguez, miembro de la Guardia Urbana de la ciudad condal, fue encontrado en el maletero de su propio coche el pasado 4 de mayo muy cerca del pantano de Foix, en Barcelona.

Desde entonces, la investigación del crimen ha ido perfilando una historia cada vez más negra. Los Mossos d'Esquadra detuvieron este sábado a la expareja de la víctima, Rosa Peral, y a su exnovio y actual amante, Albert López, ambos agentes de la Policía Local barcelonesa, acusados de acabar con la vida de Rodríguez después de que, supuestamente, éste descubriera que habían retomado su relación sentimental a sus espaldas.

Tras su ruptura, Peral denunció a López por la presunta difusión de fotos íntimas a todos sus contactos de correo electrónico. El juicio por esta 'pornovenganza', que tenía que celebrarse este martes, se pospuso el pasado jueves a instancias del abogado de Rosa, que ha dejado de representarla.

Turbio pasado

Pero a este entramado sentimental se suman las sospechas que sobrevolaban a cada uno de los miembros del triángulo mortal. Rosa, de 33 años, había sido investigada junto a los miembros de su unidad que participaron en agosto de 2014 en un dispositivo contra la venta ambulante en Monjuïc, ya que uno de los manteros, de origen pakistaní, falleció por las lesiones sufridas tras caer por una zona acantilada mientras huía de los agentes. La investigación judicial se acabó archivando al determinar los Mossos que el vendedor ambulante cayó accidentalmente.

El agente detenido, de 36 años, fue condenado en 2013 por un juzgado de Barcelona a una multa de 300 euros y a una indemnización de 600 euros por una falta de lesiones por agredir a un mantero de origen senegalés en un dispositivo contra la venta ambulante.

Por otra parte, el fallecido también fue acusado el pasado agosto por agredir a un motorista que se saltó un semáforo en la carretera de l'Arrabassada de Barcelona, aunque la causa se acabó archivando porque el joven retiró la denuncia tras alcanzar un acuerdo extrajudicial.

Pedro Rodríguez, que estaba de baja para recuperarse de una operación en la espalda -en la que le implantaron una prótesis que fue clave para poder identificar el cadáver-, fue apartado de la Urbana por ese incidente con el motorista, aunque al archivarse el caso se podría reincorporar.

Suspendidos y a disposición judicial

La Guardia Urbana de Barcelona suspenderá cautelarmente de funciones y abrirá expediente a la pareja de agentes de la Unidad de apoyo diurno (USD) de la policía barcelonesa detenidos este fin de semana por su presunta implicación en el homicidio de Pedro Rodríguez. 

Rosa Peral ha pasado este martes a disposición del Juzgado de Instrucción 8 de Vilanova i la Geltrú. Albert López también pasará en las próximas horas a disposición de este juzgado.

Los Mossos les han trasladado desde las comisarías de Sant Boi de Llobregat y de Sant Feliu de Llobregat, donde han estado detenidos en los calabozos desde este sábado, de manera que no tuvieran contacto entre ellos.