El hombre que mató este viernes a sus dos hijas, avisó de sus intenciones a través de una carta a su exmujer. Los hechos ocurrieron en su vivienda de O Casal (Pontevedra), a unos tres kilómetros de la casa dónde vivían las niñas con su madre en Moroña. 

Según publica el periódico La Voz de Galicia, la exmujer, Rocío Vieites, llamó a la Guardia Civil en el mismo momento en el que recibió la misiva, pero no llegaron a tiempo. Cuando se presentaron en la casa de David Oubel Reinero, éste ya había asesinado presuntamente a sus dos hijas -de 4 y 9 años- con una radial. 

El presunto autor tenía que entregar a las dos pequeñas este sábado a su madre, de la que se encuentra divorciado desde hace algo más de un año, han señalado fuentes de la investigación. Según apunta el periódico gallego, David Oubel fue encontrado en la bañera y aparentaba estar en estado de somnolencia, supuestamente provocado por la ingestión de pastillas.

Además, señala que presentaba heridas en las muñecas y los brazos causadas por la radial. Sin embargo, el personal sanitario las calificó como leves. El hombre fue conducido al hospital de Montecelo, después de su tentativa frustrada de acabar con su vida. 

Algunos vecinos de la zona explicaron que fue David quien terminó con el matrimonio cuando inició una relación sentimental con otro hombre. Desde ese momento, los vecinos de la población de Moraña comenzaron a descalificarlo por su condición sexual, e incluso, se le restringió el acceso en algunos locales. 

De la instrucción se encargará el juzgado número uno de Caldas, que es el que está de guardia, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Galicia.