Los pantanos de la parte baja de la cuenca del Ebro, en Mequinenza, Riba-roja d'Ebre y Flix, están desembalsando de forma controlada unos 1.500 m3/s de agua por el aumento del caudal del río, informa Protección Civil.

La persistencia de las precipitaciones y el deshielo en cotas por debajo de los 1.000 metros está provocando un incremento significativo de los caudales de los ríos a lo largo del recorrido de la cuenca del Ebro, desde la cabecera hasta Aragón.

Por este motivo, se mantiene la previsión de que los caudales y niveles de los ríos vayan aumentando los próximos días.

Concretamente, los caudales salientes en las estaciones de aforo situados en la parte baja del Ebro son por la tarde de 1.568 m3/s en Ascó y de 1.515 m3/s en Tortosa, según datos de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE).

Según los datos de Protección Civil, además el caudal de desagüe por la mañana en el pantano de Mequinenza era de 1.600 m3/s, mientras que en Riba-roja era de 1.520 m3/s y en Flix, de 1.550 m3/s.

Estas maniobras de desembalse se llevan a cabo para absorber los caudales que llegarán a lo largo de esta semana procedentes de los tramos alto y medio del Ebro, y se prevé que puedan durar varios días.

Desde Miranda de Ebro hasta Tortosa están activados los avisos por crecida hidrológica, entre nivel amarillo y rojo.

Protección CLos pantanos de la parte baja del Ebro abren compuertas para controlar el caudal (INUNCAT) por las lluvias abundantes previstas y por la posibilidad de incremento de los caudales en toda la cuenca del Ebro y sus afluentes, tanto en cabecera como en montaña.

Protección Civil recuerda que las actividades de ocio y profesionales en los ríos pueden quedar afectadas y se recomienda no realizarlas por los caudales de peligro que se pueden alcanzar