El PSOE inicia este lunes la semana decisiva para su renovación interna con el Congreso Federal Extraordinario del próximo sábado y domingo, que elegirá a la nueva dirección del partido encabezada por Pedro Sánchez, el primer secretario general de la historia elegido directamente por los militantes socialistas.

Mañana los socialistas celebrarán la última reunión de la Comisión Ejecutiva Federal dirigida por el aún secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba y, aprovechando la presencia de los barones territoriales en Madrid, Pedro Sánchez mantendrá varios encuentros.

Así, Sánchez se entrevistará con el secretario general del PSE, Patxi López, y el de Aragón, Javier Lambán.

Sánchez ha aprovechado estos últimos días para tantear a la práctica totalidad de los barones regionales y para hablar por separado con los dos perdedores de las primarias para secretario general: Eduardo Madina y José Antonio Pérez Tapias.

De momento y a falta de lo que suceda esta próxima semana, lo único seguro es que Madina no estará en la nueva dirección del PSOE por decisión propia, aunque ha pedido a Sánchez que cuente con la "gente de enorme valía" que ha apoyado su proyecto.

El todavía secretario general del grupo parlamentario socialista ha anunciado que en lo que resta de legislatura se quedará trabajando como diputado en el Congreso, ayudando a su partido desde su escaño.

Una renuncia que ha lamentado el propio Sánchez, que ha asegurado que aspiraba a contar con Madina y "con el resto de los compañeros" para conformar una nuevo partido desde la unidad.

El líder electo no adelanta nada sobre la composición de su futura Ejecutiva y alega que todavía quedan muchos días hasta el congreso federal del próximo fin de semana, aunque eso no impide que circulen quinielas de todo tipo sobre las personas que podrían integrarla.

Durante estos días se especula con el nombre de la exministra Carme Chacón; el exlehendakari Patxi López; el actual secretario de Organización de los socialistas andaluces, Juan Cornejo, o el ex número dos del PSOE-A, Mario Jiménez.

Además de la nueva Ejecutiva, el PSOE también deberá renovar la dirección del grupo parlamentario socialista, en el que Madina ha sido hasta ahora secretario general.

El propio Alfredo Pérez Rubalcaba, ya en la casilla de salida y que se despedirá oficialmente de la secretaría general en el Congreso del próximo fin de semana, se ha hecho a un lado y ha dejado claro que no pretende inmiscuirse en las decisiones del nuevo líder socialista.

Ha subrayado que el calendario de las primarias para la candidatura a presidente de Gobierno es cuestión de Pedro Sánchez y de su dirección y que será "respetuoso" con lo que decidan.

Y es que prácticamente todos los barones territoriales del partido se han decantado en los últimos días por retrasar esas primarias hasta después de las elecciones municipales y autonómicas de mayo de 2015, aunque hay quien advierte de que eso les deja en desventaja en el caso de que se produzca un adelanto electoral.

Entretanto y antes del Congreso Extraordinario del próximo fin de semana, el PSOE elige este domingo a los delegados, en los distintos congresos provinciales e insulares.

Se nombrará un delegado por cada 190 militantes socialistas y, en el caso de que alguna agrupación provincial o insular no alcance representación mediante la aplicación de ese baremo, se le garantizará un delegado.

El orden del día del Congreso contempla un discurso de "despedida" del líder saliente, Alfredo Pérez Rubalcaba, su última intervención antes de abandonar la primera línea política y regresar a la Universidad, después de su decisión de dejar también su escaño en el Congreso.

También se abordará la modificación del artículo 5.1.b) de los Estatutos del PSOE para que los secretarios generales provinciales, insulares y autonómicos sean elegidos mediante voto individual, directo y secreto de los militantes, al igual que lo ha sido Pedro Sánchez.

Después vendrá la negociación sobre la composición de la nueva Ejecutiva que, si se mantiene la tradición inveterada de los cónclaves socialistas, no se cerrará hasta bien entrada la madrugada del próximo domingo, antes de que sea ratificada con el voto de los delegados.

Pedro Sánchez, ya como secretario general del partido, cerrará el Congreso el domingo 27 de julio con un discurso de clausura en el que se espera marque las líneas maestras en esta nueva etapa que se abre en la historia del PSOE.