Los Mossos d'Esquadra han detenido este viernes a 33 personas en la Mina y la Zona Franca (Barcelona), vinculadas a un clan familiar que supuestamente trafica con drogas, en una gran operación policial en la que han participado unos 300 agentes de varias unidades, con perros y helicópteros.

La madrugada ha sido movida en el barrio de La Mina, de Sant Adrià de Besós (Barcelona), donde los Mossos han llegado con múltiples furgonetas, cortando varias calles e irrumpiendo en una veintena de domicilios en busca de drogas, por orden del juzgado número 3 de Badalona.

En la operación han participado agentes de las áreas regionales de recursos operativos (Arro), de seguridad ciudadana, brigada móvil (Brimo), unidad canina, de los grupos especiales de intervención (Geis), además de helicópteros, ha indicado el propio consejero de Interior, Ramon Espadaler.

A raíz de la operación, el consejero ha reafirmado su apoyo al cuerpo de los Mossos, cuya imagen se ha visto enturbiada tras el suceso en el que murió el empresario Juan Andrés Benítez en el Raval de Barcelona y por el que están imputados ocho mossos d'esquadra.

"Tenemos mucha confianza (en los Mossos) y estamos recibiendo muchas muestras de apoyo, algunas más explícitas y otras menos vistosas de muchos ciudadanos que confían en el cuerpo", ha asegurado el consejero en su discurso de inauguración del curso académico 2013-2014 del Instituto de Seguridad Pública de Cataluña (ISPC), en Mollet del Vallès (Barcelona).

El titular de Interior ha confirmado también en ese acto a los periodistas que la operación antidroga de este viernes se ha centrado en un clan familiar que presuntamente se dedica a la distribución y venta de estupefacientes.

Según algunos de los vecinos que contemplaban este viernes sorprendidos la gran presencia policial, se trataría del clan de "los Manolos", aunque este extremo no ha sido confirmado por los Mossos.

Muchos vecinos se han enterado de la macrooperación por los incesantes movimientos de un helicóptero que ha sobrevolado la zona durante buena parte de las siete horas que, aproximadamente, ha durado la operación antidroga, han explicado.

Una habitante de una de las calles del barrio ha dicho a los periodistas que en el piso séptimo de su escalera, debajo de su vivienda, ha oído mucho ruido poco después de las 03.30 de la madrugada y que entraban muchas personas en el mismo.

Este piso habría sido una de las más de dos docenas de viviendas que se han registrado este viernes en La Mina, a la búsqueda de drogas, en una cantidad de la que la policía no ha informado pero que se estima en importante y de diverso tipo, como cocaína, heroína y hachís.

Por el momento, la macrooperación policial está bajo secreto de sumario por lo que no se han dado a conocer más detalles.

Los agentes no solo han buscado este viernes drogas en La Mina sino que han continuado la operación en el barrio de la Zona Franca de Barcelona, donde se han hecho varios registros, pero sin el despliegue anterior.