Velas y flores para recordar a Ruth y José un año después de su desaparición

Centenares de velas y flores han sido depositadas este lunes junto a la puerta de entrada de la finca de 'Las Quemadillas' de Córdoba para recordar a Ruth y José, los hermanos de 6 y 2 años que desaparecieron hace justo un año y que presuntamente fueron asesinados por su padre, José Bretón.

La iniciativa ha partido de la plataforma 'Justicia para Ruth y José', cuyo portavoz, Toni Santiago, ha explicado a los periodistas que el acto ha consistido en encender velas a lo largo de toda la fachada de la finca de la familia paterna de los niños y lanzar flores al interior de la misma.

El acto, en el que han participado cerca de dos centenares de personas, ha tenido lugar después de que en la iglesia Padres de Gracia de la capital cordobesa se haya celebrado una misa en recuerdo de los menores organizada por una cofradía de Córdoba.

Santiago ha señalado que con el acto de homenaje se pretende "mostrar el respeto hacia la familia de unos niños que perdieron su vida aquí hace un año" y para que "la luz de Ruth y José no se apague nunca".

El portavoz de la plataforma ha subrayado que seguirán con iniciativas similares hasta que la ciudad de Córdoba "cuente con un parque con el nombre de Ruth y José y haya una estatua con dos haces de luz hacía el cielo que los recuerde".

Asimismo, Santiago ha subrayado que se ha elegido la finca de 'Las Quemadillas' como lugar para el homenaje de este lunes porque "está claro y demostrado por la investigación que los niños perdieron la vida aquí hace un año y, prácticamente seguro, a manos de su padre".

El suceso tuvo lugar el 8 de octubre de 2011, cuando José Bretón avisó a los servicios de emergencia de que sus hijos habían desaparecido mientras jugaban en el parque Cruz Conde de Córdoba, por lo que presentó una denuncia ante la Policía Nacional.

Tras conocerse que Bretón y su esposa Ruth Ortiz habían iniciado los trámites de separación y descartar la Policía la implicación de la madre de los niños, la investigación se centró en la finca de "Las Quemadillas", propiedad de los abuelos paternos de los menores.

En ese lugar, los investigadores encontraron dos días después de la desaparición restos óseos en una hoguera que Bretón hizo el 8 de octubre, aunque el informe científico de la Policía determinó que los huesos eran de animales.

Este informe enterró una pista que meses después se reveló como fundamental y durante los cuales la investigación se centró en peinar minuciosamente la finca de "Las Quemadillas", ya que los agentes tenían la plena certeza de que los menores nunca salieron de allí.

Sin embargo, un informe del forense Francisco Etxeberría encargado por la familia materna el pasado mes de agosto determinaba que los restos óseos hallados en esa hoguera eran humanos y que podían pertenecer a niños de entre 2 y 6 años.

Tras dos informes adicionales que confirmaban la tesis se Exteberría, la situación procesal de Bretón cambió y de estar acusado de dos delitos de detención ilegal, el juez instructor del caso le imputó dos delitos de asesinato con alevosía.

Con el caso prácticamente cerrado, la familia materna espera que los investigadores devuelvan los restos óseos, que siguen siendo analizados para tratar de encontrar restos de ADN, para que los niños puedan recibir sepultura, mientras que Bretón se encuentra a la espera de juicio y tratando de evitar el ser juzgado por un tribunal popular, tal y como marca la ley.