presidente bmw group de españa y portugal
Manuel Terroba: "El coche eléctrico es un desconocido, pero engancha cuando lo pruebas"
El CEO de BMW visita los concesionarios del fabricante alemán en Zaragoza que, pese a las dificultades de la pandemia, lideran el mercado de automóviles ‘prémium’ entre particulares
El presidente de BMW Group de España y Portugal, Manuel Terroba, apuesta de forma decidida por el futuro eléctrico del automóvil como base para lograr una movilidad sostenible.
¿El coche 100% a pilas es una solución o el motivo principal de la crisis que atraviesa hoy el motor?
Es una oportunidad y forma parte de la transformación hacia la que nos dirigimos. Pero, también es un gran desconocido para el cliente. Eso sí, cuando se conoce, engancha. El coche eléctrico ha llegado para quedarse. Vivimos en plena transición hacia la conducción sostenible y la electrificación, que va a llegar seguro y que tendrá en el futuro un protagonismo muy notable.
Sus ventas no terminan de arrancar en España. ¿Por qué?
La velocidad de adaptación de nuestras infraestructuras a nivel país será fundamental para la penetración del coche eléctrico en España. Desde BMW apostamos absolutamente por esta tecnología, con el híbrido como modelo de transición en el aprendizaje hacia una conducción más sostenible. En BMW hemos sido pioneros con modelos como el i3.
¿Habrá en la marca más modelos eléctricos este 2021?
Acabamos de presentar nuestro primer SUV 100% eléctrico, el iX3. Más tarde llegarán el i4 y el iX.
¿Cómo entiende BMW la movilidad sostenible?
En nuestra marca no solo tenemos en cuenta el nivel de emisiones de nuestros vehículos, que son muy eficientes, sino también cuidamos toda la cadena de valor, desde la extracción de materiales para incorporarlos en nuestros componentes y baterías hasta los procesos de producción y reciclaje. La movilidad sostenible para nosotros se entiende en cómo vigilamos el uso de energías en nuestras fábricas o los ahorros en los procesos de producción y la logística. Nuestras fábricas han logrado un 50% de ahorro de consumo de agua y, además, la mitad de la energía que usan procede de fuentes renovables.
Respecto a Europa, ¿cómo está España en número de puntos de recarga eléctrica?
Lamentablemente, España está a la cola de Europa. Es necesario un acelerón importante en los próximos años. El consumidor español necesita certidumbre para saber dónde puede recargar la batería y que disponga además de un acceso fácil. Es necesario que parte de los fondos europeos de recuperación económica por la covid se dediquen a mejorar las infraestructuras eléctricas.
¿Cuándo podremos viajar por todo el país con un eléctrico sin preocuparnos del ‘repostaje’?
Antes de lo que esperamos. Es una de las piezas fundamentales en la generación de confianza para que el consumidor decida comprar un eléctrico.
El Gobierno ha puesto en marcha un nuevo plan de ayudas. ¿El Moves III dará impulso a la electrificación del automóvil?
Sin duda. Supone una dotación de fondos importante y cuenta con un sistema de asignación regional diferente y mejor respecto a planes anteriores.
Las marcas fabrican hoy coches tecnológicamente avanzados, conectados y autónomos, pero lo que más crece es el mercado de ocasión. ¿Hay mucha distancia entre la demanda y la oferta de automóviles?
No. Con la pandemia, la movilidad individual ha crecido. El cliente ha pasado del transporte público al privado, donde el usado ha aumentado, pero también se ha convertido en una puerta de acceso para conocer nuestros productos. Son mercados diferentes.
Ante la amplia variedad de tecnologías que ofrece hoy el automóvil, ¿cómo afronta el cliente la compra?
Con incertidumbre y con no mucho conocimiento. Los fabricantes tenemos que ser capaces de orientar al cliente para no siempre llevarlo al eléctrico o al híbrido. Nuestro reto es escuchar, conocer su situación, sus desplazamientos,... y ofrecerles la mecánica que se ajuste mejor a sus necesidades.
Diésel, gasolina, híbrido,... ¿Cuál es mejor?
Lo bueno es que el usuario puede elegir hoy el que más le convenga. Nuestro nuevo modelo, el iX-3 es nuestro primer SUV con toda la variante de mecánicas posible: gasolina, diésel, híbrido o eléctrico.
En su visita a Zaragoza, ¿cómo ha visto los concesionarios de BMW?
A pesar de que las ventas están siendo menores que las de otros años por la crisis, estamos contentos porque lideramos el mercado ‘prémium’ de particulares.
¿La pandemia ha llegado a poner en peligro su viabilidad?
No, todo lo contrario. Pese a lo complejo de la situación y de los momentos difíciles que ha supuesto, hemos aprovechado para acelerar en la digitalización del proceso de venta. Hemos pasado de un modelo más clásico de concesionario donde los clientes visitaban nuestras instalaciones de manera física a una forma en la que ahora lo hacen de forma digital.
En la actualidad, hay tiendas de ropa que venden bicicletas y supermercados que tienen coches en sus catálogos de productos. ¿Hacia dónde va la comercialización de los vehículos?
Nuestro reto como marca es estar presentes en el viaje digital del usuario hacia nuestros coches, donde tenemos que competir no solo con nuestro mercado propio, sino también con las experiencias de otro tipo de ventas como las de quien compra una camisa o saca unos billetes de avión por internet.
Al final, ¿se impondrá la compra ‘on line’?
El concesionario es y seguirá siendo la columna vertebral de nuestro negocio.
¿Cómo prevé que llegará la recuperación del mercado?
Dependerá mucho de la velocidad de la vacunación porque dará estabilidad al mercado y evitará algo de incertidumbre, tanto en lo que se refiere a la salud personal como económica. Queremos ser optimistas. Abril, de hecho, da señales de que está siendo algo mejor que el primer trimestre del año.
Aragón pugna por lograr una fábrica de baterías para el coche eléctrico en España. ¿Por qué es tan importante?
En un sector clave en nuestra economía como el motor, que aporta más del 10% del PIB, saber adaptarnos a las nuevas necesidades del mercado será vital para España y también para Aragón.
