La llegada de inmigrantes a las costas de la isla italiana de Lampedusa, la más cercana a África, continuó este martes con el arribo de una embarcación con 280 irregulares a bordo, entre ellos 20 mujeres y un niño, informó la Guardia Costera.

Los inmigrantes, que fueron trasladados a un centro de acogida de la pequeña isla, se suman a los 1.180 irregulares alojados en el lugar.

En las últimas 72 horas, según datos del Ministerio de Interior, llegaron a las costas del sur de Italia más de 2.000 inmigrantes, que han sido distribuidos en centros de acogida de la península y de las islas a la espera de que se decida su futuro.

Además de los inmigrantes llegados a Lampedusa, la Guardia de Finanzas (policía fiscal y de fronteras) interceptó este martes en aguas de Otranto, en la región sureña de Puglia, la más cercana a Albania, una barca a vela de catorce metros con 56 inmigrantes afganos en su interior.

De los 56 irregulares, 31 eran hombres, 14 mujeres y 11 niños. Los afganos fueron abandonados en alta mar por contrabandistas que se dieron a la fuga en una balsa que posteriormente fue abandonada, según la Guardia de Finanzas.

El ministro del Interior, Roberto Maroni, informó este martes en la tradicional rueda de prensa de Ferragosto (el puente del 15 de agosto), de que Italia vive una «anómala emergencia humanitaria», ya que desde el 1 de enero hasta el 31 de julio han llegado a las costas italianas un total de 48.036 inmigrantes, en su mayor parte de origen libio y tunecino.

El titular de Interior agregó que de esos casi 50.000, un total de 13.667 inmigrantes fueron repatriados hasta el 31 de julio, y que espera llegar a los 30.000 al final de año.