GEORGIA

Rusia advierte que Georgia está rearmándose con riesgo de volver a desestabilizar el Caucaso

El presidente de Georgia defiende su reacción contra Rusia y pide la aplicación completa del plan de pacificación.

El ministro de Defensa ruso, Anatoly Serdyukov, declaró que Georgia está tratando de rearmarse, y advirtió que esta medida podría desestabilizar aún más la región del Cáucaso, que ya se encuentra en una situación complicada tras la guerra ocurrida el pasado verano. Por su parte, el presidente del Georgia, Mijail Saakashvili, en su intervención durante la 54 Asamblea Parlamentaria de la OTAN, celebrada en Valencia, defendió su actuación contra Rusia, alegando que si no hubiera hecho nada, las cosas hubieran sido mucho peores. Además, pidió la aplicación completa del plan de pacificación propuesto por Nicolás Sarkozy, y acusó a Rusia de cometer "la violación más flagrante y condenable del Derecho Internacional desde la Segunda Guerra Mundial".


Serdyukov, que acudió a una reunión en Turquía para discutir sobre la cooperación militar entre ambos países, declaró que "los esfuerzos realizados por el bando georgiano para aumentar su potencial militar es motivo de preocupación", y que dichas iniciativas podrían tener consecuencias "bastante superiores" a las que se vieron en agosto. Además, durante la rueda de prensa concedida en Ankara tras el encuentro con Turquía, advirtió que podría desembocar en una mayor inestabilidad de la región, que ya de por sí está alterada.


Desde el conflicto armado ocurrido en agosto, y que duró cinco días durante los cuales las tropas rusas llegaron a tomar temporalmente grandes extensiones de suelo georgiano, ambos Gobiernos se acusan mutuamente de ser los culpables. Además, Moscú se encuentra indignada por el giro pro occidental que está tomando su ex satélite, sobre todo por su interés en unirse a la OTAN, que está reforzando en los últimos días. En este sentido, también critican fuertemente al presidente estadounidense George Bush, por su presión para la rápida adhesión de Ucrania y Georgia, aunque hasta ahora sus esfuerzos no han sido suficientes.

Saakashvili contraataca


Por su parte, el presidente georgiano, Mijail Saakashvili, compareció ante la 54 Asamblea Parlamentaria de la OTAN, un órgano no vinculante, a la que asistió como invitado y aspirante a entrar en la Alianza Atlántica. Durante su intervención, el presidente georgiano defendió el uso de las armas que realizó el pasado agosto, pues aseguró que tenía que elegir entre "reaccionar o no hacerlo", y que si hubiera elegido la otra opción, hubiera sido mucho peor porque miles de georgianos hubieran quedado atrapados en Osetia del Sur.


También justificó su acción porque lo que ocurrió fue "la violación más flagrante y condenable del Derecho Internacional desde la Segunda Guerra Mundial", un derecho que según Saakashvili fue "asesinada" con la acción rusa, que fue "premeditada diplomática y militarmente", desde "meses e incluso años antes". Además, pidió la aplicación completa del plan de pacificación de la zona propuesto por el presidente francés Nicolás Sarkozy, y no una solución temporal, pues las soluciones diplomáticas en "el Siglo XXI deben ser soluciones del Siglo XXI, y no del Siglo XIX".


Por último, reclamó que las potencias europeas no consideren la acción rusa como "aislada", porque de lo contraría, se podrían producir "más Georgias". Después de su intervención, el presidente georgiano tuvo que responder a varios delegados de otros países, que se oponen a la actuación de Georgia el pasado verano, y a su reacción armada.