TRAGEDIA EN NORUEGA

La policía noruega estuvo a punto de disparar a Breivik en la isla de Utoya

Los agentes de la unidad especial ya habían tomado posiciones para dispararle cuando uno de ellos constató que estaba desarmado, fue entonces cuando se retiró la orden.

Anders Behring Breivik, con jersey rojo, a su llegada a los juzgados de Oslo
El presunto autor de la matanza abandona el juzgado tras declararse no culpable
EFE

Los policías desplazados a la isla noruega de Utoya estuvieron a punto de disparar a Anders Behring Breivik, que el pasado viernes acabó con la vida de 76 personas con un coche bomba y un tiroteo, según ha informado este jueves la agencia NTB en base a círculos policales.


Los agentes de la unidad especial ya habían tomado posiciones para disparar a Breivik cuando uno de ellos constató que estaba desarmado. Fue entonces cuando se retiró la orden de dispararle, que inicialemente se dio para evitar que siguiera atacando a las personas que asisitían a un congreso del partido socialdemócrata en la isla. Breivik se entregó a la policía con los brazos en alto.


El diario 'Aftenposten' asegura además que la policía pudo identificar a Breivik antes de que iniciara la masacre de Utoya gracias a las grabaciones tomadas en el barrio gubernamental de Oslo, donde hizo estallar un coche cargado de explosivos y mató a ocho personas.


Por otro lado, expertos en explosivos aseguraron al diario VG que los daños causados por esa bomba podrían haber sido mucho mayores de no ser por la presencia de un pasaje subterráneo que redujo el efecto del estallido.


«Eso (el pasaje) salvó muchas vidas y evitó más daños en los edificios», aseguró el experto Per Negaard al diario. Negaard cree además que Breivik empleó un detonador que le dio un minuto y 15 segundos para huir del lugar.


Las autoridades están estudiando ahora en detalle las grabaciones de los videos de seguridad así como la computadora de Breivik y su actividad en Internet previa a los ataques.