La OTAN aseguró que los cuatro cazambombarderos F-18 españoles cuya retirada fue anunciada hoy por la ministra de Defensa, Carme Chacón, han tenido un papel "inestimable" en las operaciones sobre Libia.

La retirada de los cuatro aviones "ha sido completamente coordinada" con la Alianza Atlántica, según dijo la portavoz adjunta de la organización, Carmen Romero, quien destacó que España continúa aportando otros medios navales y aéreos a la misión "Protector Unificado".

Romero añadió, en una declaración, que la aportación de los F-18 "ha desempeñado un papel inestimable" en la operación, y señaló que es una "prerrogativa" de cada país aliado decidir el nivel de contribución a la misión.

"Todos los aliados siguen plenamente comprometidos con nuestro objetivo, que es el final de la violencia contra el pueblo libio", concluyó.

La ministra Chacón anunció en Madrid la retirada de los F-18, si bien detalló que España va a mantener otras unidades que participan en la operación, como los dos aviones de reabastecimiento en vuelo, una fragata y un avión de patrulla marítima.

También indicó que el submarino español que participa en esta operación internacional va a dejar de patrullar.

Los F-18 españoles estaban desplegados en la base de Decimomannu, al sur de la isla italiana de Cerdeña, y se dedicaban a tareas de vigilancia del espacio aéreo libio, por lo que no participaban en operaciones de ataque sobre el territorio de ese país.