RELACIONES INTERNACIONALES

Israel teme la caída de su gran aliado

Egipto es el aliado más importante de Israel en el mundo árabe.

Una caída del régimen de Mubarak podría poner patas arriba toda la región. Y el líder de la oposición, El Baradei, saca de quicio a Israel. El jefe del Estado egipcio es probablemente el último líder árabe a quien a Israel le gustaría ver caer: durante tres décadas los distintos jefes de Gobierno israelíes supieron valorar los buenos servicios del hoy mandatario de 82 años.


«Podría ser el comienzo de un movimiento revolucionario en todo Oriente Próximo. Y hay peligro. La cuestión es cómo sigue evolucionando la ira de la opinión pública. Si los fundamentalistas islámicos la explotan y llegan al poder, esto no llevará a un buen fin (...) Israel cerró acuerdos de paz con Egipto y Jordania y si los Gobiernos proccidentales en esos países caen, es probable también que la paz esté en peligro», comenta el profesor de estudios políticos de la Universidad de Bar Ilan, Eitan Gilboa.


El ex embajador israelí en Egipto Zvi Mazel tranquiliza a sus ciudadanos. «No hay motivo para suponer que Egipto vaya a rescindir el acuerdo de paz, porque ello desencadenaría un conflicto, lo que sería contraproducente para la economía egipcia y las relaciones con Estados Unidos», escribió en el diario 'Jerusalem Post'.


Egipto fue el primer país árabe que cerró un acuerdo de paz con Israel, en 1979. Por otro lado, ambos pueblos están tan alejados, que los políticos hablan de una «paz fría». Sin embargo, los políticos israelíes valoran desde hace tres décadas los servicios de Mubarak y de su jefe del servicio Secreto, Omar Suleiman, pues la cúpula egipcia bien controlaba a Hamás, que tiene el poder en Gaza, o se comprometía como mediador en un intercambio de prisioneros entre Israel y Hamás.