Un cargamento de diez camiones de ropa y calzado comenzó a entrar este sábado en la Franja de Gaza a través del paso fronterizo de Kerem Shalom gracias al permiso de las autoridades israelíes. Esta es la primera vez que Israel autoriza la entrada de estas mercancías en Gaza desde hace casi tres años, aunque continúa sin permitir la entrada de cemento o acero.

Los comerciantes palestinos advierten de que este cargamento no es suficiente para satisfacer la demanda, por lo que pidieron a Israel que permita la entrada de las mercancías retenidas en sus puertos.

En la larga lista de mercancías cuyo tránsito está prohibido debido a su posible uso militar también se incluyen materiales como libros y lapiceros de colores para las escuelas.

El embargo impuesto por Israel sobre la Franja de Gaza desde la toma de poder por parte del movimiento islamista Hamás en 2007 ha sido condenado por la comunidad internacional y Naciones Unidas, que considera que la medida es un castigo indiscriminado contra el millón y medio de habitantes del territorio.