BIRMANIA

El próximo 31 de julio se emitirá el juicio contra la líder opositora birmana y premio Nobel de la Paz

Suu Kyi está acusada por haber acogido en su casa a un ciudadano estadounidense y haber violado las condiciones de arresto domiciliario que se le imputaron en el año 2003. Su abogado considera que puede ser declarada inocente pero augura poca probabilidad de que se cumpla lo que la ley estima.

U Nyan Win, abogado y portavoz de la líder opositora, Suu Kyi, atiende a la prensa tras la visita judicial
El próximo 31 de julio se emitirá el juicio contra la líder opositora birmana y premio Nobel de la Paz
REUTERS. Aung Hla Tun

La sentencia contra Suu Kyi, líder opositora birmana y premio Nobel de la Paz, será emitida el próximo 31 de julio, tal y como ha anunciado el juez tras concluir la última vista del proceso en Rangún.


Suu Kyi está acusada de haber violado las condiciones del arresto domiciliario que cumplía desde el año 2003 por haber acogido en su casa al ciudadano estadounidense John Michael Yettaw. De ser hallada culpable, puede ser condenada a una pena máxima de cinco años de prisión.


"Esperamos lo mejor pero también estamos preparados para lo peor", ha afirmado Nyan Win, abogado de Suu Kyi y portavoz de su partido, la Liga Nacional por la Democracia (LND).


Win ha considerado que la activista tiene opciones de ser declarada inocente según la ley, pero ha vaticinado que es poco probable que el tribunal se ciña a la legalidad por la naturaleza política del caso.


"Si es puesta en libertad sin condiciones, regresará a su casa ese mismo día", ha dicho el letrado. El proceso ha terminado esta mañana con la presentación de los argumentos finales por parte de la fiscalía y la última repuesta de la defensa.


Desde que arrancó el pasado 18 de junio el juicio a Suu Kyi ha sido condenado por gobiernos de todo el mundo, que denuncian que la Junta Militar están empleando la justicia para borrar a la activista de las elecciones que el régimen planea celebrar en 2010 y tachados de farsa por el movimiento democrático.


El régimen birmano considera esas críticas como una injerencia en sus asuntos domésticos. Así lo ha reiterado a través del diario oficial ‘New Light of Myanmar’, que ha publicado un editorial acusando a Yettaw de ser un ‘agente infiltrado’ encargado de causar revuelo para forzar la puesta en libertad de Suu Kyi.


El periódico ha denunciado que el norteamericano fue "enviado" con ese propósito a Birmania y puso en duda el motivo que ha alegado para su visita. Yettaw, ha recordado el rotativo, ha accedido al domicilio por una zanja que rodea a la Embajada de Estados Unidos en Rangún y fue detenido a escasos metros de la residencia del encargado de negocios, que ejerce de embajador mientras ambos países no restablezcan sus lazos diplomáticos.


Birmania es una férrea dictadura militar desde 1962 y no celebra un proceso electoral democrático desde 1990, cuando la LND encabezada por Suu Kyi obtuvo una victoria rotunda que jamás ha sido acatada por los uniformados. La Nobel de la Paz, de 64 años, ha vivido privada de libertad durante casi catorce de los últimos veinte años.