El balance de muertos por el terremoto de Sichuan ya sobrepasa los 51.000

Las autoridades chinas elevaron la cifra de víctimas mortales por el terremoto de Sichuan en casi 10.000 personas. Así, los muertos ya superan los 51.000 y el número de desaparecidos hace temer que la cifra ascienda incluso hasta 80.000. A este drama se suma el de los cinco millones de ciudadanos que se han quedado sin hogar, a quien la ayuda tanto local como internacional intenta socorrer en la medida de lo posible. Precisamente Pekín lanzó un llamamiento implorando el envío de tres millones de tiendas de campaña, ya que tan sólo han llegado unas 400.000.

En concreto, el país asiático llora ya 51.151 muertes por el terremoto que la pasada semana asoló la provincia de Sichuan, según informó la agencia estatal de noticias Xinhua. La Oficina de Información del Consejo de Estado habla también de 29.328 desaparecidos, por lo que todo parece indicar de que la cifra de fallecidos dista mucho de ser definitiva.

La magnitud del desastre mantiene desplegados a centenares de miles de efectivos de socorro para los damnificados, ya que alrededor de cinco millones de ciudadanos se han quedado sin sus hogares por el temblor de casi ocho grados en la escala de Richter y sus réplicas. Hasta la fecha, unas 400.000 tiendas de campaña han llegado a la zona del desastre, y precisamente el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), anunció hoy el envío de otras 11.000 para albergar a 55.000 chinos, según el responsable de la organización, Antonio Guterres.

Sin embargo, no es suficiente. El Ejecutivo central pidió hoy a la comunidad internacional otros tres millones de tiendas más, especialmente después de que las últimas precipitaciones torrenciales hayan complicado más la situación de aquellos que carecen de techo. A esta realidad se añade el temor a las enfermedades, especialmente las víricas, como la meningitis.

Todas estas gestiones, que llevan a los afectados agua, alimentos, material básico y atención sanitaria han llevado al Parlamento Europeo a felicitar a Pekín por la rápida respuesta tras el temblor. Los eurodiputados celebraron la disposición a aceptar ayuda del exterior y que se haya permitido a los medios de comunicación informar de los sucedido, con relativa apertura en comparación con su vecina Myanmar, también de actualidad por otro desastre natural.

Fin del luto

Los tres días de luto decretados por las autoridades ya han concluido y, por tanto, China poco a poco trata de volver a la normalidad, especialmente ansiada en vísperas de los Juegos Olímpicos. Durante las jornadas de duelo nacional, el relevo de la antorcha quedó interrumpido, pero el relevo de la llama pudo arrancar de nuevo en la ciudad de Ningbo, según informaciones de la BBC recogidas por otr/press. La próxima parada, mañana, será Shanghai, antes de seguir con su periplo que le llevará a Pekín para encender el pebetero el 8 de agosto y dar comienzo oficialmente a la cita deportiva.

China también se afana en frenar a todos aquellos ciudadanos que tratan de sacar provecho de la desgracia ajena, bien sea por lucro o por simple diversión. Dos hombres chinos fueron detenidos por extender el rumor de que se iba a producir otro terremoto como el del 12 de mayo. Tres días después del suceso, un grupo de estudiantes que entraban en una escuela en la ciudad de Lanzhou, recibieron llamadas de alerta que anticipaban un nuevo seísmo. Sin embargo, los interlocutores no eran empleados oficiales, como ellos aseguraban, sino simplemente unos trabajadores de una compañía de la provincia aburridos.

En este sentido, la radio estatal lleva más de una semana advirtiendo contra este tipo de actuaciones porque "extender rumores sólo empeorará el desastre". "Nosotros tenemos la información más exacta y autorizada. Creed sólo lo que digamos nosotros", afirma el mensaje.