EEUU acusa a los talibanes de usar a civiles como escudos humanos

El Ejército estadounidense acusa a los talibanes de haber impedido el escape de civiles durante las operaciones que causaron, según el Gobierno afgano, la muerte de 40 no combatientes en la provincia sureña de Kandahar.

"Los civiles intentaron abandonar el área, pero los insurgentes les forzaron a permanecer allí mientras continuaban disparando contra las tropas afganas y de la Coalición", aseguró la comandancia de EEUU en un comunicado.

La confrontación tuvo lugar entre el lunes y el miércoles en el distrito de Shah Wali Kot, cuando presuntos insurgentes tendieron una emboscada a las tropas de la Coalición, que reivindicaron la muerte de al menos nueve talibanes.

En el comunicado, sin embargo, la comandancia se limitó a constatar la existencia de "varios civiles heridos cuando abandonaban la zona" y aseguró que no estaba claro si fueron víctimas del "fuego insurgente".

No obstante, pocas horas después la comandancia comunicó en otra nota su decisión de emprender una investigación conjunta con el Gobierno afgano en el distrito para averiguar lo sucedido.

Este miércoles, la presidencia afgana había confirmado la muerte de 40 personas, entre ellas mujeres y niños, en el bombardeo estadounidense ocurrido el pasado lunes en el pueblo de Wech Baghtu, del distrito de Shah Wali Kot.

Las víctimas celebraban una boda cuando el municipio fue bombardeado, según explicó a Efe el jefe del distrito de Shah Wali Kot, Obaidullah Popal.

La boda tenía lugar en una zona próxima al punto en el que se desencadenó el enfrentamiento entre las tropas de la Coalición liderada por Estados Unidos y los talibanes, que también confirmaron la confrontación.

Aviones de la Coalición bombardearon la zona en la que se encontraban los insurgentes y también el lugar en el que se celebraba la boda, según Popal.

La comandancia estadounidense en Afganistán dijo haber iniciado una investigación para determinar si se produjeron "bajas no combatientes en la zona" durante los enfrentamientos.

Las bajas civiles son una de las grandes preocupaciones del presidente afgano, Hamid Karzai, quien volvió a insistir en este asunto el miércoles, con motivo de su mensaje de felicitación al vencedor de las elecciones en EEUU, Barack Obama.

ACNUR ha cifrado en unos 1.500 los civiles muertos hasta finales de agosto en ataques de insurgentes y tropas internacionales.

EEUU comanda en Afganistán una coalición que cumple la misión antiterrorista "Libertad Duradera" y cuenta con una mayoría de soldados estadounidenses (unos 15.000).

Además, la OTAN tiene desplegados unos 48.000 miembros de la Fuerza de Asistencia para la Seguridad (ISAF), 18.000 de ellos estadounidenses, bajo mandato de la ONU.