ESTADOS UNIDOS

EE. UU. y Turquía encauzan las relaciones dañadas en la era Bush

La secretaria de Estado Hillary Clinton finaliza su gira por Europa y Oriente Próximo y anuncia la visita del presidente estadounidense Obama a Estambul en el plazo de un mes.

Clinton, junto a la actriz Mujde Ar (i) y la periodista Cigdem Anat (d), en la televisión turca.
EE. UU. y Turquía encauzan las relaciones dañadas en la era Bush
Osman Orsal/EFE

Las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Turquía parecen de nuevo encarriladas tras la visita de la secretaria de Estado, Hillary Clinton, y el anuncio de la próxima visita del presidente estadounidense Barack Obama a Turquía en un mes.

 

La histórica amistad entre los Gobiernos de Turquía y EE. UU. se resintió durante el mandato del presidente republicano George W. Bush a causa de varios incidentes en torno a Iraq.

 

El Parlamento turco rechazó permitir el uso de su suelo para la invasión de ese país en 2003. EE. UU. detuvo a varios agentes secretos turcos en el norte de Iraq y diversas autoridades en Ankara acusaron a Washington de dar apoyo indirecto al grupo armado PKK y de favorecer la división de Iraq.

 

Otros temas en los que se habían producido desavenencias fueron la colaboración entre Turquía e Irán y la postura más comprensiva de Ankara respecto al movimiento islamista palestino Hamás, en el poder en la franja de Gaza.

 

"Las relaciones entre Turquía y EE. UU. están basadas en la amistad, la cooperación y la alianza. (...) Hemos reafirmado mutuamente nuestra cooperación estratégica", aseguraron Clinton, quien finaliza así su gira por Europa y Oriente Próximo, y su homólogo turco, Ali Babacan, en una nota de prensa conjunta tras reunirse con el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, y el presidente de la República, Abdulá Gül.

 

"Es muy importante que hayamos puesto fin a un periodo de problemas", se felicitó el encargado de Asuntos Exteriores del Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP, en el Gobierno), Suat Kiniklioglu.

 

Según diversos analistas turcos, la Administración Obama está tratando de ganar de nuevo el apoyo de Turquía en su nueva estrategia internacional. Así, respecto al enquistado conflicto israelo-palestino, Clinton agradeció "el papel de Turquía" en el proceso de paz y defendió la "solución basada en dos Estados" que favorezcan un ambiente de "democracia, prosperidad y estabilidad" que permitan "a Israel y a sus vecinos árabes vivir en paz".

 

Igual que hicieron con la visita del enviado a Oriente Próximo George Mitchell, Erdogan y Babacan trataron de convencer a Clinton de que no se debe dejar fuera a Hamás del proceso de paz.

 

En el tema de la retirada de tropas estadounidenses de Iraq, Babacan explicó que su Gobierno "está tratando este asunto con EE. UU." ya que, presumiblemente, se realizará a través de suelo turco.

 

Uno de las razones más importantes que llevó a Clinton a Turquía fue tratar el aumento del número de soldados en Afganistán para combatir la creciente insurgencia talibán. EE. UU. presiona a Turquía para que envíe tropas de combate al país centroasiático ya que actualmente hay 800 militares turcos allí, pero no están autorizados a participar en misiones de enfrentamiento con los talibanes.