ITALIA

Berlusconi rechaza la dimisión de su asesor más próximo, investigado por corrupción

Bertolaso habría incurrido en anomalías al adjudicar contrataciones. Cuatro personas fueron arrestadas ayer por este mismo asunto.

El jefe de la Protección Civil italiana, Guido Bertolaso, anunció ayer su dimisión al ser investigado por supuestas anomalías en la adjudicación de contratos para la construcción de instalaciones para la cumbre del G-8, que debía celebrarse en la isla de La Magdalena pero que finalmente tuvo lugar en L'Aquila.

 

Tras conocerse que su nombre estaba en el registro de indagados por este caso, Bertolaso, uno de los asesores más próximos al primer ministro, Silvio Berlusconi, informó en un comunicado que había puesto su cargo a disposición del mandatario "para no obstaculizar el trabajo de los investigadores".

 

Pero Berlusconi rechazó inmediatamente la dimisión, renovando así su confianza en uno de sus hombres más próximos, al que, según anunció a finales de enero, tenía intención de nombrar ministro por su labor tras el terremoto que devastó el centro de Italia en abril de 2009 y que hizo que el G-8 fuera trasladado a L'Aquila.

 

"Parece ya un deporte nacional ir a perseguir a quien trabaja por el bien del país", comentó ayer el primer ministro durante la presentación del último libro de su amigo Bruno Vespa en Roma, en declaraciones que recogen los medios de comunicación italianos.

 

El mandatario explicó además cómo había telefoneado a Bertolaso instantes después de conocerse la noticia para comunicarle que el Consejo de Ministros, reunido ayer en Roma, había rechazado su dimisión y le había dedicado una ovación en muestra de apoyo.ellas al presidente del Consejo Superior de Trabajos Públicos, Angelo Balducci.

 

Según los investigadores, Balducci fue el hombre indicado por Protección Civil para la realización de las obras en La Maddalena, un islote cercano a la isla de Cerdeña.

 

Los cuatro detenidos están acusados de abuso de autoridad y corrupción, informaron los medios de comunicación italianos, que señalaron que los Carabineros llevaron a cabo registros en las oficinas de la Protección Civil en Roma.

 

La investigación pretende esclarecer las relaciones existentes entre Balducci y sus familiares con las sociedades constructoras encargadas de transformar en un hotel de lujo una antigua base de la OTAN en La Maddalena con motivo de la reunión del G-8 en julio de 2009, antes de que esta fuera trasladada a L'Aquila.

 

Las pesquisas, en las que se ha visto involucrado Bertolaso, se iniciaron a raíz de unas interceptaciones recogidas durante una investigación de la Fiscalía de Florencia sobre la urbanización de un área de la capital toscana, en la que está implicado un arquitecto, Marco Casamonti, que supuestamente iba a encargarse del proyecto de dicho hotel en La Maddalena.

 

Inicialmente el encuentro entre los líderes de los ocho países más industrializados del mundo debía celebrarse en la isla de La Maddalena, aunque finalmente la reunión se trasladó a la ciudad de L'Aquila, una de las más afectadas por el terremoto, para dar más visibilidad a la tragedia del seísmo, que dejó 299 muertos, y apoyar así la reconstrucción de la zona.

 

Según datos de la organización del G-8 de la isla de La Magdalena (próxima a Cerdeña), las obras en la isla para la celebración de la cumbre costaron 327,5 millones de euros, 50 millones de euros menos de lo previsto por el traslado de la reunión a L'Aquila.

 

El diario 'La Repubblica' subrayó ayer que el Tribunal de Cuentas ya había iniciado una investigación sobre las inversiones estatales destinadas a las infraestructuras de La Maddalena, que, según señala, ocho meses después del fin de las obras están en mal estado.

 

Nacido en Roma y de 59 años, Bertolaso fue calificado alguna vez por los medios como "bufón" del primer ministro Berlusconi.