Un médico militar protagoniza el último tiroteo en Estados Unidos
De origen etíope y 38 años de edad, disparó con un rifle contra dos compañeros en la base de Fort Dertrick, a una hora de Washington, y uno de ellos se encuentra en estado crítico.
Un salón de masajes de Atlanta (Georgia). Un supermercado de Boulder (Colorado). Una inmobiliaria de Orange (California). Y, este martes, una base militar de Frederick (Maryland). "Por desgracia parece que pasa todos los días, lo único que podemos hacer, tanto en las fuerzas armadas como en los cuerpos civiles, es evaluar nuestra capacidad de respuesta y asegurarnos de que estamos preparados para proteger a la comunidad", dijo con resignación Jason Lando, jefe de policía de Frederick.
El protagonista, Fantahun Girma Woldesenbet, nombre de origen etíope, era un médico militar de 38 años que empezó el día temprano disparando contra dos compañeros de la Marina en unas instalaciones adheridas a la base militar de Fort Dertrick en la ciudad de Frederick, donde vivía, a una hora de Washington. Su reacción, correr a refugiarse a la base militar en la que trabajaba, solo que la Policía fue más rápida que él en dar la descripción del coche y el sospechoso fue retenido en la barrera de seguridad mientras revisaban el coche en busca de armas.
El asesino debió de comprender que le habían descubierto, por lo que pisó el acelerador y avanzó a toda velocidad hacia el interior de la base, donde fue abatido a tiros, convirtiéndose en la única víctima mortal, por el momento. Una de sus víctimas fue dada de alta, pero la otra se encontraba en estado crítico. Con ese balance, el suceso ni siquiera se clasifica como 'tiroteo masivo', algo que en EE UU se define con un mínimo de cuatro muertos.
El arma utilizada fue un rifle, sin que se haya hecho público el calibre, pero el general Michael Tally aseguró que el cargo del militar no implicaba portar armas. La Policía no ha querido especular sobre los motivos, "hay medio centenar de investigadores tratando de responder a esa pregunta", se disculpó Lando, pero nada lo asocia a un presunto atentado islamista.
