Comienza una cumbre de la UE para desbloquear el plan de recuperación
En esta primera jornada los líderes debatirán también sobre las relaciones con Turquía.
Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) comenzaron este jueves una cumbre de dos días en Bruselas con el objetivo principal de poner fin al veto de Hungría y Polonia sobre el plan de recuperación pospandemia, después de que ayer estos pactasen con la presidencia del Consejo una vía de acuerdo.
En esta primera jornada los líderes debatirán también sobre las relaciones con Turquía, con la posibilidad de imponer sanciones por la tensión en el Mediterráneo oriental, sobre sus objetivos de reducción de emisiones contaminantes para 2030 y serán informados por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, sobre la recta final de las negociaciones del Brexit.
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, confió en que será posible lograr un acuerdo para desbloquear el paquete de recuperación, a raíz del compromiso negociado entre Alemania, Hungría y Polonia, pero admitió que no está hecho.
Cerca de la "línea de meta" del acuerdo
"Estamos cerca pero aún no sobre la línea de meta, aún falta algo de trabajo en las próximas horas para llegar a esa línea de meta y tengo confianza, pienso que es posible llegar (a un acuerdo) sobre el fondo de reconstrucción y el próximo presupuesto", dijo.
Budapest y Varsovia vetaron el paquete de recuperación, que movilizará 1,8 billones de euros, por su rechazo a condicionar los fondos al respeto del Estado de Derecho.
La propuesta de compromiso que llega a la mesa de los líderes no modifica esta regulación, pero clarifica cómo se aplicarán estas normas y que si Hungría o Polonia recurren el mecanismo ante el Tribunal de Justicia de la UE, la Comisión Europea no podrá proponer congelar fondos europeos, aunque lo considere necesario, hasta que haya una sentencia.
El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, dijo a su llegada a la cumbre que los Veintisiete están "a un ápice" de lograr un acuerdo que, consideró, será una "victoria" tanto para la unidad de la UE como para "el sentido común".
La preparación ha sido larga, hemos negociado durante semanas, y estamos a un ápice del consenso. Creo que estamos muy cerca de lograr un buen acuerdo para la unidad de la UE", dijo Orbán en una declaración a la prensa a su llegada a la cumbre.
"Cuando nuestras naciones y tantos millones de personas están realmente necesitados debido a la pandemia y sus consecuencias económicas, tenemos que comportarnos razonablemente y encontrar un modo hacia enfoques fiables y una victoria del sentido común", dijo.
El primer ministro polaco, Mateusz Morawicki, consideró a su llegada que "Europa necesita que se aprueben los fondos del covid y del nuevo presupuesto plurianual", pero también "certezas" legales para evitar "ataques" injustificados a los países".
"Hoy nosotros tememos ser atacados de forma injustificada. Pero evidentemente, en el futuro puede ser cualquier país", dijo, añadiendo que precisamente para evitar esta "incertidumbre" y "ambigüedad" se ha trabajado en las conclusiones consensuadas con la presidencia alemana.
Estas, dijo, son un "prerrequisito" para poder seguir adelante con el paquete.
"dudas" y "preocupaciones" aún sin despejar
Sin embargo, el primer ministro neerlandés, Mark Rutte, advirtió de que aún quedan por "resolver dudas" en la cumbre y de que su país quiere garantías de que Budapest y Varsovia respetarán al Estado de Derecho antes de dar su visto bueno al acuerdo.
En concreto, Rutte quiere que confirmen que estos compromisos tendrán un efecto retroactivo en caso de que haya que esperar a un posible fallo del Tribunal de Justicia de la UE.
También el primer ministro belga, Alexander de Croo, dijo que su país tiene "importantes preocupaciones" que espera puedan ser resueltas durante la cumbre.
Por su parte, la canciller alemana, Angela Merkel, consideró que del desbloqueo del plan de recuperación depende demostrar la "capacidad operativa" de la UE ante situaciones como la pandemia, pero avisó de que esto no puede ocurrir a cambio de "sacrificar" la condicionalidad respecto al estado de Derecho.
En el frente del Brexit, la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, dijo que la UE está dispuesta a dar acceso al mercado único comunitario, "el mayor del mundo", a los británicos, pero bajo unas "condiciones justas" para los trabajadores y empresas europeos.
"Este delgado equilibrio no se ha logrado por el momento. Nuestros negociadores aún están trabajando y tomaremos una decisión el domingo", dijo en referencia al plazo que Bruselas y Londres marcaron ayer como tope para determinar si es posible cerrar un acuerdo que defina su relación posbrexit.
La reunión comenzará con un tributo al expresidente francés Valery Giscard d'Estaing, fallecido recientemente, quien será también homenajeado en la sede de la Eurocámara en Estrasburgo en febrero.
