España acogerá a 50 de los inmigrantes que esperan frente a las costas de Sicilia

Hasta 450 personas permanecen en dos barcos militares a la espera de su destino.

Otro barco con inmigrantes que estuvo varios días cerca de Sicilia hasta que finalmente pudo atracar.
Otro barco con inmigrantes que estuvo varios días cerca de Sicilia hasta que finalmente pudo atracar.
Efe

El Gobierno español ha anunciado su disponibilidad para recibir a 50 de los 450 migrantes rescatados ayer en el Mediterráneo y que están hoy frente a las costas de Sicilia, a la espera de que el Gobierno italiano logre reubicarles en otros países de la Unión Europea.

En un comunicado, el Gobierno informa de que España, Portugal y Francia acogerán cada uno a 50 personas del grupo de 450 inmigrantes rescatados por Italia este sábado en el Mediterráneo y que se encuentran a bordo de una nave de la Guardia de Finanza italiana y otra de la agencia Frontex.

Esta disponibilidad, según el Ejecutivo, está condicionada a que ese grupo de personas desembarque en Italia y a que este país acepte igualmente acoger a una parte de ellas. Después, cada país examinará caso por caso el de cada una de los extranjeros que sean aceptados.

"España, Portugal y Francia muestran así su responsabilidad y solidaridad y su voluntad común para aportar una solución europea a los flujos migratorios y el drama humanitario que se da en el Mediterráneo", señala el Ejecutivo de Pedro Sánchez, quien también ha remarcado en twitter esta intención del Gobierno. "Es una muestra de nuestro compromiso por aportar soluciones a los flujos migratorios y de solidaridad con el drama humanitario", afirma el presidente en un tuit.

Por su parte, según el primer ministro italiano, Giuseppe Conte, Alemania también se ha comprometido a acoger a otras 50 personas. "Esta es la solidaridad y la responsabilidad que siempre hemos pedido a Europa y ahora, tras los resultados concretos que obtuvimos en el último Consejo Europeo, empieza a ser realidad", dijo en Facebook Conte.

El primer ministro, que el sábado escribió a los jefes de Estado o de Gobierno de la UE, apostó por "seguir en la misma línea, con firmeza y respetando los Derechos Humanos" de los inmigrantes.

Los 450 inmigrantes partieron el viernes por la mañana en una barcaza desde la costa libia y fueron interceptados un día después cerca de la isla de Lampedusa y evacuados a un barco italiano y otro de la agencia europea Frontex.

En concreto 176 están a bordo de la patrullera "Protector" de Frontex y otros 266 en la "Monte Sperone" de la Guardia de Finanza (policía fronteriza italiana), mientras que ocho, entre ellos una embarazada, fueron trasladados a un hospital de Lampedusa.

Este domingo ambas naves militares se encuentran a la espera de órdenes ante la costa de Pozzallo, en Sicilia, y han recibido víveres para los próximos dos días, según medios locales.

El ministro italiano del Interior, Matteo Salvini, avanzó que en las próximas horas bajarán de los barcos 16 madres y 11 niños, según dijo a medios italianos en Moscú, adonde se ha desplazado para presenciar la final del Mundial de fútbol.

Fuentes del Gobierno italiano ven este reparto de los inmigrantes como "un gran resultado" pues va en la línea de lo que se pide desde hace meses, afrontar a nivel comunitario este fenómeno.

Ocurrió lo mismo con el barco de la ONG Lifeline, que llegó el 27 de junio con 230 inmigrantes de La Valeta después de un pulso entre Malta e Italia, a cambio de que sus ocupantes fueran reubicados en otros países europeos. Dieron su disponibilidad Irlanda, Italia, Luxemburgo, Portugal, Francia, Bélgica y Holanda y Noruega.

Un primer grupo de inmigrantes fueron reubicados en Francia la pasada semana y un segundo partió este domingo desde Malta a Luxemburgo, según un comunicado del Ejecutivo del país insular europeo.

Salvini celebró, en declaraciones medios italiano en Moscú, que "Italia ha dejado de ser el campamento de prófugos del mundo" pero afirmó que "el objetivo final" es acabar con la llegada de inmigrantes, no repartirlos.

E insistió en que los puertos italianos estarán cerrados para los barcos de las ONG que salvan inmigrantes, al ser preguntado por las dos embarcaciones de la española Proactiva Open Arms que llegarán al Mediterráneo central tras zarpar desde Barcelona.

Italia autoriza el desembarco

Italia autorizó este domingo el desembarco de 450 inmigrantes que permanecían a bordo de dos barcos militares frente a las costas de Sicilia (sur) y que serán divididos en cinco países europeos que han aceptado acogerlos, entre ellos España.

Los inmigrantes, hombres, mujeres y menores, llegarán al puerto siciliano de Pozzallo, a la espera de ser enviados a los países que han dado su disponibilidad después de que así lo pidiera el Gobierno italiano, informaron fuentes del Ministerio del Interior.

El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, escribió el sábado a los líderes de los Veintisiete países de la Unión Europea (UE) para pedirles que se hicieran cargo de parte de estas personas, y avanzó que su país aceptaría "una cuota" de las mismas.

Las fuentes señalaron que para el ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, esta es "una victoria política" pues logra implicar a otros países de la UE en la recepción de los inmigrantes que llegan a las costas italianas.

Los 450 inmigrantes partieron en la mañana del viernes en una barcaza desde la costa libia, presumiblemente desde la ciudad de Zuara, próxima a la frontera tunecina, hasta aproximarse a Malta y finalmente a las islas italianas de Lampedusa y Linosa.

Fue en un punto entre estas dos islas donde un día después, el sábado, fueron interceptados y evacuados todos ellos a una nave de la Guardia de Finanza italiana (policía fronteriza) y a otra de la agencia europea de protección de confines, Frontex.

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