Un español, identificado como Miguel Francesch Pazos, murió en un incendio de un barco de pesca amarrado en el puerto de la ciudad de Quelimane, en la provincia mozambiqueña de Zambézia (centro), donde trabajaba como mecánico, informaron este jueves a Efe las autoridades marítimas locales.

El fallecimiento del español, de 34 años y originario de la localidad gallega de Castiñeiras, ocurrió este miércoles, pero la Administración Marítima de Zambézia aún no ha aclarado las causas del siniestro.

El fuego, que tardó cerca de medio día en ser controlado por los bomberos, acabó también con la vida de otras tres personas, dos mecánicos mozambiqueños y un jefe de máquinas de Indonesia.

Un trabajador de la empresa propietaria de la embarcación que acudió al lugar poco después de que se desatara el incendio declaró a medios locales que sus compañeros habían estado haciendo trabajos de soldadura en la sala de máquinas y que ese fue el origen del incendio.

Según su testimonio, las víctimas se quedaron encerradas y las llamas se propagaron rápidamente por el interior de la nave, cuyo revestimiento era de material inflamable.

La embarcación, construida en el año 2000 en Huelva, formaba parte de una flota de embarcaciones dedicadas a la pesca de camarones y langostinos, propiedad de la empresa Krustamoz.

Esta compañía pertenece desde 2012 a CNFC (Corporación Nacional China de Pesca, siglas en inglés) y fue fundada hace 40 años en Mozambique por el grupo español Amasua.