El consejero de Cultura, Santi Vila, ha tachado este martes de "fracaso de la política" el momento que atraviesa el litigio por 97 obras originarias del Monasterio de Sijena que fueron vendidas por la orden sanjuanista a la Generalitat en un acto de compra-venta que una juez oscense ha considerado nulo, y ha ordenado una devolución provisional de las piezas a la espera de fallo firme.

"Lamento muchísimo que hayamos llegado a este punto. Yo siempre advertí de que nos podríamos encontrar en él. Lo más deseable hubiera sido que hubiéramos dejado a los políticos hacer política, y buscar acuerdos", ha defendido el conseller antes de visitar una exposición sobre Pilar Aymerich en la Galería Eude de Barcelona.

El titular de Cultura, que hace tres meses logró un preacuerdo político con el Gobierno de Aragón para hablar de patrimonio compartido que fue vetado por ERC, ha defendido que "lo más deseable era la vía del acuerdo" que podía hacer posible una gestión patrimonial conjunta, dejando de lado el debate de la propiedad.

Ha lamentado que los "sentimientos enardecidos por ambas partes hicieron inviable un acuerdo", si bien ha agradecido a ERC el apoyo de este martes a la hora de entregar 53 obras no catalogadas a Aragón y evitar el retorno de 44 piezas para evitar incumplir la legislación catalana.

También ha constatado que Aragón vive este conflicto con mucho dolor e intensidad, y ha dejado claro: "Quiero insistir y hacer notar que no estamos ante un conflicto identitario entre catalanes y aragoneses".

Ha insistido en que se trata de un conflicto de jurisdicción civil para evaluar si la compra-venta de las obras se ajustó a derecho o no: "Esto no debe enfrentar a territorios y es lamentable que pueda haber alguien interesado en enfrentar a aragoneses y catalanes".

Vila ha subrayado que el de Sijena es un conflicto heredado y no generado por los gobernantes actuales, que "sólo se acabará resolviendo con generosidad, diálogo y voluntad de acuerdo por parte de las partes enfrentadas"."Buena fe"

Vila se ha mostrado convencido de que la compra de las obras se hizo de buena fe por parte de la Generalitat, y ha comentado la decisión del Museu Diocesà de Lleida de denunciar a las monjas que vendieron el patrimonio para reclamar el dinero de vuelta, así como los costes de conservación y salvaguarda aplicados al arte sacro.

Ha recordado que sobre la cuestión de Sijena hay dos litigios abiertos, uno en relación a las citadas 97 obras, de las cuales este martes el Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC) ha devuelto 53, en su mayoría objetos litúrgicos, y el Museu Diocesà de Lleida tiene pendientes de devolución 44 más.

Sobre las obras en la capital del Segrià, ha recordado que estas 44 piezas --de las que siete están expuestas-- se encuentran catalogadas, y se deben seguir una serie de trámites administrativos para evitar incumplir las leyes catalanas en materia de patrimonio.Cumplirá la ley 

Preguntado por si la Generalitat piensa devolver las 44 obras, ha respondido: "Tanto yo como el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y antes Artur Mas somos personas honorables, siempre hemos cumplido con las leyes, cuando son firmes deben ser cumplidas".

Vila ha subrayado que "más allá del lugar en que se encuentren las obras el litigio continúa", y ha reiterado que la Generalitat agotará las vías jurídicas pertinentes para continuar con lo que ha considerado una reclamación legítima.

Según el consejero , la titular del Juzgado de Instrucción 1 de Huesca hubiera podido esperar a sentencias definitivas a la hora de ordenar devoluciones "para no tensar el ánimo".