Las autoridades alemanas de supervisión financiera (BaFin) van a facilitar a los refugiados en Alemania la apertura de una cuenta bancaria y relajar la documentación que deben presentar.

Así se desprende de una carta de la BaFin a la que tuvo acceso el diario económico alemán 'Handelsblatt'.

"En el futuro se podrá aceptar una serie de documentos de las autoridades alemanas de extranjería que sólo cumplen los estándares mínimos", según 'Handelsblatt'.

Hasta ahora son las cajas de ahorro alemanas las que aceptan a los refugiados como clientes.

La Asociación de Cajas de Ahorro Alemanas y Giros (DSGV por sus siglas en alemán) va a ofrecer a los refugiados material informativo en varios idiomas para entender el sistema bancario, según 'Handelsblatt'.

El ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, deberá disponer en 2016 unos costes adicionales de entre 1.800 y 3.300 millones de euros por los refugiados y en 2019, incluso, 7.000 millones de euros, añade el rotativo.

El martes llegaron a Baviera 2.500 refugiados y desde comienzos de la semana casi 4.300 personas.

También el martes unos 200 refugiados llegaron en tren a las ciudades alemanas de Stuttgart y Fráncfort, muchos de ellos procedentes de Siria y Afganistán, una cantidad desconocida hasta ahora, afirmó la Policía.

Un refugiado que llega a Alemania debe registrarse primero en el estado federado en el que se encuentra y ahí las autoridades deciden si puede quedarse o si debe ir a otro.

El reparto de refugiados en los estados federados alemanes se lleva a cabo según su recaudación de impuestos y su población, por ello Renania del Norte Westfalia es el que más refugiados acepta, seguido de Baviera y Baden-Württemberg.

El Gobierno alemán ha hecho hincapié en que quiere integrar los refugiados en el mercado laboral lo antes posible mediante programas de intervención temprana.

Un refugiado cuesta en Alemania 1.000 euros al mes, según cifras de la ciudad de Hamm, cerca de Dortmund en el estado de Renania del Norte-Westfalia (en el oeste de Alemania).