​El Papa clama "nunca más la guerra" en Sarajevo y repudia a los que hacen negocio con ella

El Pontífice pide en Bosnia Herzegovina que los procesos de paz del país sean "sólidos e irreversibles".

El papa Francisco, este sábado en Sarajevo
?El Papa clama "nunca más la guerra" en Sarajevo y repudia a los que hacen negocio con ella
Efe

El papa Francisco ha clamado "nunca más la guerra" y ha repudiado a los que hacen negocios vendiendo armas en los conflictos bélicos, arrancando el gran aplauso de las más de 30.000 personas que han asistido a la misa multitudinaria celebrada en el Estadio Olímpico de Sarajevo, el mismo escenario que acogió en su día a Juan Pablo II.


Francisco ha hecho resonar en numerosas ocasiones la palabra "paz", pero ha alertado de una "tercera guerra mundial combatida por partes" que se percibe "en el contexto de la comunicación global".


El Pontífice argentino ha criticado a aquellos que fomentan "deliberadamente" este clima bélico, en particular los que buscan "la confrontación entre las distintas culturas y civilizaciones, y también cuantos especulan con las guerras para vender armas".


Durante la homilía de la misa celebrada durante su viaje a Bosnia Herzegovina, el Papa ha reflexionado sobre el concepto de la Paz y la ha definido como "el sueño de Dios, el proyecto de Dios para la humanidad, para la historia, con toda la creación".


"Es un proyecto que encuentra siempre oposición por parte del hombre y por parte del maligno", ha resaltado.


"La guerra significa niños, mujeres y ancianos en campos de refugiados; significa desplazamientos forzados; significa casas, calles, fábricas destruidas; significa, sobre todo, vidas truncadas", ha lamentado.


Así, ha llamado a construir la paz "con sus acciones cotidianas, con actitudes y gestos de servicio, de fraternidad, de diálogo, de misericordia".


"Hacer la paz es un trabajo que se realiza cada día, paso a paso, sin cansarse jamás", ha recordado. Por eso ha implorado que los hombres puedan llegar a perdonarse "cuando alguno tenga quejas contra otro".


El Papa ha rechazado que la paz como don de Dios tenga un "sentido mágico" porque, según ha expresado, "Él, con su Espíritu, puede imprimir estas actitudes en nuestros corazones y en nuestra carne, y hacer de nosotros verdaderos instrumentos de su paz".Procesos de paz

También ha pedido que los procesos de paz emprendidos sean cada vez más "sólidos e irreversibles", en un discurso ante las autoridades políticas del país durante la ceremonia de bienvenida en el Palacio Presidencial de Bosnia Herzegovina.


Francisco, que ha aterrizado en el aeropuerto internacional de Sarajevo a las 8.57 horas de esta mañana, ha sido recibido por los tres miembros de la Presidencia Tripartita: Dragan Covic (Croacia), Mladen Ivanic (PDP) (Serbia) y Bakir Izetbegovic (SDA) (Bosnia), elegidos el pasado 28 de octubre de 2014.


Así, el Papa ha pedido a los responsables políticos que todos los ciudadanos sean iguales ante la ley y su aplicación, "independientemente de su origen étnico, religioso y geográfico", y ha dicho que "la paz y la concordia entre croatas, serbios y bosnios" y las iniciativas para la convivencia entre musulmanes, judíos y cristianos, tienen una importancia "que va más allá de sus fronteras".


"Testimonian ante el mundo que la colaboración entre los diversos grupos étnicos y religiones para el bien común es posible, que se puede dar una pluralidad de culturas y tradiciones que contribuyan a encontrar soluciones originales y eficaces a los problemas", ha subrayado el Pontífice.


Además, el Obispo de Roma ha afirmado que Bosnia es el ejemplo de que incluso las heridas más profundas "pueden ser curadas a través de un proceso que purifique la memoria y dé esperanza para el futuro".Octavo viaje apostólico

Durante el primer discurso de su octavo viaje apostólico, Francisco ha expresado su "alegría" por visitar Bosnia Herzegovina que, según ha subrayado, "tienen un significado especial para Europa y el mundo entero". Para el Papa, este país es el ejemplo de que "es posible también curar las graves heridas del pasado reciente, y mirar hacia el futuro con esperanza".


Así, ha pedido un "diálogo paciente y confiado" para que las personas y sus familias "puedan transmitir los valores de su propia cultura". En este sentido, ha llamado a reconocer los "valores fundamentales" que la humanidad tiene en común para así oponerse "con éxito a la barbarie de los que toman ocasión y pretexto de cualquier diferencia para una violencia cada vez más brutal".


Por ello, ha pedido a los actores de Gobierno a ser los primeros servidores de sus comunidades con una actividad que proteja en primer lugar los derechos fundamentales de la persona humana, entre los que ha destacado el de "la libertad religiosa".


Para el Papa, de ese modo será posible construir "una sociedad más pacífica y justa", para que con la ayuda de todos se encuentre solución "a los múltiples problemas de la vida cotidiana del pueblo".