Aznar se encuentra con el Aznar de George W. Bush

El expresidente español es el primer mandatario retratado por Bush que visita su exposición.

Aznar posa sonriente junto a su retrato
Aznar... con el Aznar de Bush

El expresidente del gobierno español José María Aznar vio de primera mano en Dallas (Texas) el retrato suyo que le pintó el expresidente estadounidense George W. Bush y que forma parte de la primera exposición que el político texano hace como artista.


Bush hijo dio una visita guiada al político español por su biblioteca presidencial y por la exposición inaugurada a principios de abril, según explicó Hannah Abney, directora de Comunicaciones del centro dedicado al presidente de Estados Unidos entre 2001 y 2009.


La portavoz se refirió también a la fotografía que Aznar difundió en la red social Instagram y en la que el exmandatario español aparece sonriente junto con el retrato de su figura de fondo.


El expresidente del gobierno español José María Aznar tiene un lugar destacado en la exposición, titulada 'El Arte del Liderazgo', junto con Tony Blair y el Dalai Lama, y fue pintado con una sonrisa, con traje y corbata azulados, a partir de una fotografía de archivo.


El retrato de Aznar está acompañado por un juego de figuras de ajedrez de madera que el político español le regaló y un ejemplar del libro 'Ocho años de gobierno: una visión personal de España', del exmandatario español, con una dedicatoria para Bush en la que expone su buena relación política.


La relación entre ambos mandatarios queda plasmada también en dos imágenes seleccionadas por el propio Bush, la de un paseo de ambos por el rancho de los Bush en Texas y la fotografía en la que los dos líderes conversan por teléfono con Tony Blair y Silvio Berlusconi, donde se ve a Bush con los pies sobre la mesa.


José María Aznar se convirtió en el primer mandatario retratado por el pintor novel Bush que visita la exposición.


La muestra reivindica las aptitudes diplomáticas de Bush a través del trato personal y familiar con líderes mundiales como Angela Merkel, Vladimir Putin y Felipe Calderon.


La exposición exhibe una treitena de obras y decenas de objetos que revelan las relaciones cordiales de Bush con mandatarios ideológicamente tanto afines como opuestos.