Catorce personas fueron detenidas este jueves en Dublín por su supuesta vinculación al IRA Auténtico, una escisión del ya inactivo Ejército Republicano Irlandés (IRA), opuesta al proceso de paz, informaron fuentes de la policía irlandesa (Garda).

Las detenciones se producen después de que este grupo terrorista hiciese una demostración pública de fuerza durante el funeral este sábado de uno de sus dirigentes, Alan Ryan, quien fue tiroteado en la capital irlandesa el pasado 3 de septiembre.

Durante las exequias, varios individuos enmascarados y vestidos con ropa de combate dispararon varias veces al aire en el cementerio donde se enterró a Ryan, al que asistieron un gran número de disidentes del IRA Auténtico procedentes de distintas partes de la isla.

Un portavoz de la Garda explicó que la operación policial comenzó este jueves hacia las 05.00 horas GMT en domicilios de Dublín y de los condados vecinos, al tiempo que no descartó más detenciones en las próximas horas.

Ryan, de 32 años y considerado como uno de los líderes de la banda armada, fue asesinado a plena luz del día por un pistolero frente a un bloque de apartamentos del barrio de Clongriffin, al norte de Dublín.

El IRA Auténtico se escindió del IRA en 1998 por su oposición a la firma en abril de ese año del acuerdo de paz del Viernes Santo y se dio a conocer perpetrando en la localidad norirlandesa de Omagh el atentado más sangriento en la historia del conflicto.

La explosión de un coche bomba colocado en su calle más comercial el 15 de agosto de 1998 acabó con la vida de 29 personas, dos de ellas españolas, y causó más de 300 heridos.

Mientras en Irlanda del Norte el IRA Auténtico compagina sus ataques contra las fuerzas de seguridad e intereses británicos con actividades delictivas, en la República de Irlanda se dedica casi exclusivamente al crimen organizado.

Según la Garda, Alan Ryan dirigía una red de extorsión en Dublín y su asesinato podría estar vinculado a las luchas de poder que mantiene el IRA Auténtico con otras bandas de delincuentes comunes.

Su familia, no obstante, le despidió con un comunicado en el que aseguraba que el funeral, adornado de toda la parafernalia paramilitar, "era un tributo perfecto hacia los ideales puros del republicanismo".

En la misiva se le describía como "un republicano irlandés activo" y, en consecuencia, "orgulloso de serlo y nosotros estamos orgullos de que lo fuera".