Cinco personas han muerto y otras dieciocho han resultado heridas en la explosión de una bomba ante una comisaría de la provincia turca de Kayseri, en el centro del país, informaron los medios turcos.

Según las primeras noticias, los agentes de la comisaría de Pinarbasi, un municipio de Kayseri, abrieron fuego contra un coche que intentó entrar al recinto y la persona al volante activó una bomba adosada a su cuerpo, informaron las emisoras NTV y CNNTürk.

En la explosión resultó muerto un agente de policía, así como el presunto terrorista que conducía el vehículo, y dieciocho personas sufrieron heridas de distinta consideración, seis de ellas graves.

Tras las declaraciones del ministro, todos los medios turcos se han referido a que fueron tres los atacantes y a que todos perecieron en el atentado.

"El objetivo inicial no era la comisaría; hicieron explotar la bomba allí porque la Policía los persiguió", declaró el ministro, según la edición digital del diario turco Hürriyet.

La emisora CNNTürk se refiere a la existencia de un segundo atacante, aunque no se ha precisado si también murió en la explosión.