EL primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha acusado este martes a Siria de mantener sus ataques contra la población civil a pesar de su promesa de retirar las tropas de las ciudades del país en el marco del acuerdo de paz propuesto por el enviado especial conjunto de Naciones Unidas y la Liga rabe, Kofi Annan.

Erdogan ha recalcado que su Ejecutivo es "pesimista" respecto a las opciones de que el alto el fuego iniciado el 12 de abril bajo el acuerdo vaya a tener éxito. Sin embargo, ha dicho que Turquía esperará y monitorizará el desarrollo de los eventos en el país árabe.

Ankara sostiene que el presidente sirio, Bashar al Assad, ha de abandonar el poder. Por su parte, el régimen sirio ha acusado a Turquía de intentar minar el plan de paz ayudando y armando a los rebeldes.

"Retrasar la solución al problema en Siria sólo dará más tiempo al régimen para nuevos actos de brutalidad. El régimen está usando las mismas tácticas", ha dicho, según ha informado el diario turco 'Today's Zaman'. "A pesar de que no tenemos esperanzas sobre (el éxito de) el alto el fuego, esperaremos, monitorizaremos los eventos y traeremos a Siria ante la atención de la comunidad internacional", ha agregado.

Por otra parte, ha acusado a Siria de tratar a los dos periodistas turcos que desaparecieron en el país árabe el mes pasado como "prisioneros". "No han sido liberados a pesar de ser periodistas. El régimen ha debe responder por ello", ha apostillado.