Huesca. María José Rienda, Carolina Ruiz, Paul de la Cuesta, Pau Carreras y Ferrán Terra encabezan la nómina de esquiadores que se van a dar cita desde hoy en Candanchú para participar en el Campeonato de España de Esquí que se celebra en la pista de Tobazo de esta estación de la Jacetania. La prueba está abierta a deportistas de otras nacionalidades ya que cuenta para la FIS. El hecho de celebrarse con la temporada tan avanzada, posiblemente reste afluencia de esquiadores de otras latitudes, aunque se espera alguno de nacionalidad francesa en la estación altoaragonesa.

Los nacionales de esquí alpino se celebran los días 6, 7 y 8 en las modalidades de Súper Gigante, Eslalon y Eslalon Gigante. La salida de Súper Gigante será a 1.980 metros de altitud, a 1.930 la de Gigante y a 1.750 la de Eslalon. Las tres terminarán a 1.550 metros de altitud. La pendiente máxima de la pista será de un 60% y la mínima de un 20. Los jefes de equipo determinarán hoy el horario de la competición, pero se prevé que la salida se dé a las 9.30.

La dirección de Candanchú lleva varias semanas trabajando en la pista Tobazo -homologada por la FIS para la Universiada de 1981 y certificada después año tras año- donde se celebrará el campeonato de España. La prueba de Súper Gigante, que requiere de unas líneas de protección de red muy largas, ha sido una de las más laboriosas en su preparación. Jorge Navarro, responsable de comunicación de Candanchú, explica que "la pista de competición hay que prepararla de forma distinta a la comercial. Tiene que ser con nieve muy dura para que se mantenga lo mejor posible y garantizar que todos los corredores se deslicen de forma parecida. Y esto se consigue con mucho pisado de máquinas, el trabajo de los cañones e incluso en algunos casos, no este año, se echa agua directamente de cañón o se inyecta sobre la pista".

Los organizadores esperan que la aragonesa Leyre Morlans esté en la línea de salida, pese a que anunció su retirada de la alta competición tras quedarse descartada para la Olimpiada de Vancouver. Su presencia es una incógnita que se resolverá hoy mismo.

Además de los senior del equipo nacional, también estará el segundo combinado nacional y los junior, que vienen pisando fuerte y que quieren ocupar pronto su lugar en la elite del esquí español.

Desafortunadamente, la alta competición en España, sigue siendo un páramo salvo casos aislados. La falta de seguidores implica que ni siquiera haya gradas para ver la llegada de los corredores -unos 200- a la cota 1.550. "Nos gustaría que hubiera más afluencia de público viendo la competición, pero no podemos hacer nada más. La verdad es que la presencia de aficionados no es lo fuerte del esquí en España", indica Navarro.

La tradición deportiva de Candanchú ha estado ligada desde siempre a la competición. "Aquí, siempre hemos considerado el esquí como deporte, en contraposición a otro modelo que lo ve como ocio. Por eso, siempre hemos realizado multitud de actividades que así lo demuestran con campeonatos de España de alpino y de fondo...".

Por lo que respecta a las posibilidades del esquí aragonés para alzarse con medallas en estos campeonatos, la realidad es que está en un momento de transición. Con el anuncio de retirada de Leyre Morlans, las posibilidades de sacar alguna medalla se desvanecen ya que los más firmes candidatos al podium están en periodo de formación. La más firme promesa es Inda Garín, juvenil de primer año.