La localidad de Vera de Moncayo reivindica este fin de semana que la trufa negra ´tuber melanosporum` es una seña de identidad de este territorio. En el ánimo de los organizadores no está competir con otras zonas de Aragón donde la producción es mayor como Sarrión, en la comarca Gúdar-Javalambre (Teruel), o Graus, en La Ribagorza oscense. En Vera de Moncayo todos suman para que Aragón sea una potencia mundial.

En la VI Feria de la Trufa de Vera de Moncayo se está mostrando durante todo el fin de semana de qué forma ha crecido en los últimos años el potencial productor de este territorio, donde en la actualidad hay más de 400 hectáreas de producción.

Durante la feria se celebran muchas actividades, pero una de las más destacadas es el concurso de trufas –se busca el mejor hongo de la provincia respondiendo a criterios como el tamaño, la forma y el aroma–, que en esta edición ha adquirido Miguel Ibáñez, gerente del restaurante El Molino de Berola.

Miguel es un clásico de estas pujas. El año pasado también se hizo con la mejor trufa, pero con una diferencia sustancial en el precio. Y es que este sábado la cotización  alcanzó los 5.100 euros por un ejemplar de 587 gramos recogido en Anento y presentado por Beatriz Lahoz. El año pasado, el gerente de El Molino de Berola pagó dos mil euros por una trufa de medio kilo.

Miguel asegura que en su establecimiento no tiene problema para darle salida a este hongo. Poco a poco ha conseguido que se conozca y se demande más ofreciendo distintas elaboraciones en tostadas con aceite y revueltos, o presentada con colmenillas.

La puja para llevarse la mejor ´tuber melanosporum` estuvo reñida y por eso se elevó el precio tanto entre asistentes procedentes de Zaragoza, Huesca y Teruel. Por otra parte, la trufa ganadora en la categoría de Aroma la presentó Pablo Igual, de Mora de Rubielos, y se vendió por 300 euros. Paula Sanz, de La Trufa du Coin, ha sido su compradora.

Además, el primer puesto en la categoría de Presencia ha sido para la que presentó Eva Beltrán, recolectada en Anento, que llegó a los 150 euros en la subasta y adquirió Javier Giménez, de Calamocha. En ambos casos se duplicó el valor de salida.

El jurado del Concurso de las Mejores Trufas ha estado compuesto por Isabel Bertolín, Lina Soler y Alicia Bertolín, integrantes del panel de cata de la Asociación de Truficultores y Recolectores de Trufa de Teruel (Atruter). En total, se han presentado 22 trufas procedentes de distintos puntos de Aragón y de Soria.

En la jornada del domingo, los protagonistas son los canes participantes en la tercera edición del Concurso Nacional de Perros Truferos de la Sierra del Moncayo, para el que hay inscritos una veintena de perros, con importantes premios en metálico para los tres mejores.

Por supuesto, las degustaciones forman parte de este evento durante todo el fin de semana. El restaurante Ullate de Tarazona es el que se encarga de la parte gastronómica con tapas, almuerzos y cenas con la ´tuber melanosporum` a disposición de los visitantes en diferentes presentaciones.