Una cosecha equilibrada con grandes vinos

Como viene siendo habitual, las bodegas de las denominaciones de origen Somontano y Cariñena han sido las primeras en vendimiar en Aragón. Muchas de ellas han comenzado esta semana, como Bodegas Alodia, Viñas del Vero y Pirineos, en la provincia de Huesca, o Care, en la de Zaragoza.

Jesús Navascués, director técnico de esta última empresa y uno de los enólogos con más trayectoria y experiencia de Aragón, destaca que a la vista de las primeras uvas recolectadas, en concreto las de la variedad chardonnay, para elaborar vino blanco, la añada podría ser calificada de "excelente", ya que, gracias a las temperaturas frescas, el ciclo vegetativo y la maduración han sido más normales que en los dos últimos años, en los que el calor provocó maduraciones precipitadas y más complicaciones para elaborar los caldos. "Van a ser unos vinos muy equilibrados, con una buena acidez y con un grado alcohólico más ajustado, alrededor del 12,5% en los blancos. La buena maduración favorecerá que sean vinos con buen color y con aromas intensos y afrutados. Además, las uvas están muy sanas, creo que va a ser una gran añada", resume Navascués.

En Bodegas Solar de Urbezo, también de Cariñena, la vendimia comenzó este lunes por la noche. Sus técnicos informan de que, según los muestreos realizados, el fruto está muy sano, maduro y equilibrado, por lo que se obtendrá un mosto de gran intensidad aromática y con una excelente concentración de polifenoles, en el caso de la uva merlot.

Vinos suaves y redondos

Por su parte, Jesús Astraín, responsable técnico de Bodega Pirineos, resalta que al ser 2013 un año más lluvioso y más fresco que los precedentes, el envero y la maduración se están desarrollando de una forma más pausada. En su opinión, "encontraremos en los vinos aromas más frescos y de gran finura e intensidad y, sobre todo, tendremos vinos de más suavidad, muy buen color y con taninos muy redondeados". "El viñedo –añade– tiene un aspecto magnífico, se han acumulado azúcares en las bayas y la uva goza de buen dulzor. Estamos preparados para recibir los casi 4 millones de kilos de uva –un 30% más que el año pasado– con la presunción de que va a ser una muy buena cosecha".

Las primeras uvas recogidas en Pirineos son la blanca chardonnay y la tinta merlot. Posteriormente irán llegando a la bodega las blancas de gewürztraminer, macabeo y sauvignon blanc, para pasar a las tintas tempranillo, cabernet, syrah, garnacha y las autóctonas moristel y parraleta.

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