Lascuarre

El sabor de un buen cordero

La Feria de San Martín de Lascuarre convierte a esta bella localidad altaoragonesa en un lugar de encuentro para todos los ganaderos de la comarca. Es también un sitio imprescindible para saborear los muchos productos de calidad que se producen en la zona.

El año pasado hubo mucha animación en la feria ganadera de San Martín de Lascuarre.
El sabor de un buen cordero
áNGEL GAYUBAR

Si carne de cordero quieres comer, la feria de Lascuarre no te puedes perder”. La sabiduría popular lo deja bien claro: el que desee disfrutar de un delicioso cordero este fin de semana debe acercarse hasta la localidad oscense de Lascuarre, donde hoy se celebra la Feria de San Martín. Un punto de reunión de agricultores y ganaderos de la Baja Ribagorza y también el lugar indicado para adquirir productos agroalimentarios, artesanales, textiles y decorativos de gran calidad, típicos de la comarca.


Esta cita es muy antigua. Se remonta hasta la Edad Media y, aunque no ha quedado constancia documental de su origen histórico, se sabe que fue protegida por los reyes de Aragón y que tuvo gran importancia en el comercio de ganado ovino en los siglos XIV al XIX, así como en el de La Ribagorza hasta no hace mucho. De ahí, la fama que han adquirido sus corderos en todo Aragón.


La tradición de esta feria está ligada al patrón de la antigua villa de Lascuarre, San Martín, que se celebra el día 11 de noviembre. Aunque para facilitar la afluencia de visitantes, hace casi 10 años, el Ayuntamiento de la localidad y la Comisión de Fiestas, entidades organizadoras del evento, decidieron fijar la celebración para el segundo sábado de noviembre, independientemente del día en que cayera, eso sí, manteniendo el nombre para no olvidar sus orígenes.


Lo que más llama la atención de los visitantes que acuden a esta cita por primera vez son las hogueras que se montan el mismo día de la feria. En ellas se puede asar libremente la carne de cordero para, posteriormente, comerla en un lugar habilitado en el recinto ferial. También resulta llamativo el característico juego del cacho en el que, tras un sorteo por medio de cortes a una bajara, se reparten turrones artesanos, muy típicos de la zona, entre los participantes.


La cita tiene lugar en el recinto ferial de Lascuarre. Allí se llevan a cabo diversas actividades para todos los asistentes, desde un mercadillo medieval, entre las 8.00 y las 16.00, hasta paseos a caballo por la localidad y sus alrededores, pasando por diversas exposiciones de ganado vacuno, de cuadros de punto de cruz, de tractores antiguos Lanz propiedad de Lorenzo Ferrer, y de coches, gracias al Club Clásicos Ribagorza.


Jamón y embutido

Será también por la mañana cuando se empiecen a preparar, en la zona de visitantes, las hogueras. Además de cordero se podrán degustar otros productos típicos de la zona como las chiretas, y otros productos como jamón, las tortetas, la morcilla y la longaniza, el embutido más típico de toda la comarca y que destaca notablemente en la villa de Graus. Para terminar con buen sabor de boca, es recomendable catar la artesanía pastelera de la zona. Unos crespillos, unos pastillos o los turrones artesanales que se pueden encontrar en la propia feria satisfarán las ganas de dulce de los paladares más exigentes.


Tras el campeonato de guiñote, se celebrará una sesión de baile a cargo de la orquesta El Cairo. Durante el descanso, la organización ofrecerá de nuevo productos típicos de la comarca a todos los asistentes.