Merkel: "No se ha dicho la última palabra"

La situación del fabricante de automóviles se abordará con los primeros ministros de los "Länder" con plantas de Opel, dijo Merkel, respecto a la reunión convocada para mañana, en la que se estudiarán posibilidades de ayuda para la plantilla.

La canciller alemana, Angela Merkel, afirmó que aún no se ha dicho la última palabra sobre Opel, pese al rechazo expresado por su propio gobierno a conceder las ayudas estatales solicitadas por el consorcio matriz General Motors (GM).


Las declaraciones de la canciller siguen al anuncio efectuado por el ministro de Economía, Rainer Brüderle, de que no habrá ayuda estatal.


El anuncio fue recibido con "decepción" por el consejero delegado de Opel, Nick Reilly, quien consideró que "la decisión es difícil de entender" después de un largo proceso de negociación.


El consejero delegado de Opel aseguró que los estados federados con plantas de Opel (Renania-Palatinado, Renania del Norte Westfalia, Hesse y Turingia) estaban dispuestos a proporcionar los ayudas públicas.


Reilly explicó que ahora GM estudiará todas las posibilidades de financiación y esperó que no se retracten otros países europeos que ya han asegurado las ayudas, como el Reino Unido y España, que, según dijo, ha asegurado ayudas por unos 330 millones de euros.


El comité de empresa de Opel criticó que el Gobierno alemán haya rechazado conceder ayudas a la empresa automovilística a diferencia de lo que han hecho los gobiernos de otros países europeos donde la matriz General Motors también tiene filiales.