70.000 SIN VACACIONES

Marsans tiene clientes tirados por todo el mundo

Viajes Marsans, propiedad del presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, y su socio Gonzalo Pascual, tiene en estos momentos "cientos de clientes tirados por el mundo" y dejará sin vacaciones a unos 70.000 personas que ya han contratado sus viajes para este verano, debido al impago a los proveedores.


Según señalaron fuentes de los empleados de Marsans, muchos de estos últimos clientes ya han pagado la totalidad del importe de sus viajes de verano, mientras que la mayoría ha abonado el 40 por ciento por su reserva, importes que de momento no podrán recuperar, ya que el grupo se ha quedado sin caja, después de quince días sin vender nada.


Desde que el pasado 20 de abril la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA) retiró a Viajes Marsans la licencia para la venta de billetes de avión, la empresa sólo puede gestionar las reservas hechas por sus clientes.


Los compromisos de Marsans con proveedores superan los 150 millones de euros, repartidos entre 5.000 empresas distintas, mientras que la deuda total alcanza unos 400 millones.


A muchos clientes que se encuentran en estos momento viajando se les ha negado el servicio contratado en el destino, debido al impago por parte de Marsans, y se han visto obligados a pagar de nuevo el hotel.


Asimismo, los empleados del grupo están contactando con los clientes que preveían salir de viaje este fin de semana para que no acudan a los aeropuertos, ya que las compañías aéreas no les prestarán los servicios contratados.


La misma fuente lamentó, asimismo, que las parejas que han contratado su viaje de novios con Marsans -y en mayo se celebran muchas bodas-, se quedarán sin poder disfrutarlo.


Para los empleados es "una vergüenza" lo que está pasando con Marsans, es "un atraco nacional", dicen, teniendo en cuenta que el mes de febrero pasado, el grupo generaba beneficios.


Desde el pasado fin de semana, los propietarios están negociando con dos posibles interesados en adquirir Marsans y se espera que esta tarde anuncien la venta o, en caso de que ésta fracasara, el cierre ordenado de la compañía.