Las ventas de coches en España caen un 11,5% hasta abril

El negocio del motor ha pisado el freno en seco. Al igual que el mercado inmobiliario, el automovilístico podría haber tocado techo también en España. Las matriculaciones en España acumulan un descenso de cerca del 11,5% en los cuatro primeros meses del año, a pesar de subir un 1,5% en abril. La caída de las ventas a particulares ha sido aún peor (15%) debido al frenazo del consumo provocado por la ralentización económica. Ante este panorama las asociaciones de fabricantes y vendedores han revisado de nuevo a la baja sus previsiones para el conjunto del año en el que esperan una caída de entre el 7 y el 9% de sus negocios al tiempo que piden al Gobierno que se "tome en serio" al sector del automóvil.

Las matriculaciones de automóviles en España alcanzaron 471.303 unidades en los cuatro primeros meses del año, lo que supone un fuerte descenso del 11,5% respecto al mismo periodo de 2007, según datos difundidos por las asociaciones de fabricantes (Anfac) y vendedores (Ganvam).

Durante el pasado mes de abril, pese al efecto favorable derivado de la estacionalidad de la Semana Santa, las ventas de turismos y todoterrenos sólo subieron un 1,5%, hasta 123.565 unidades. En el bimestre marzo-abril, las matriculaciones descienden un 16%.

Por canales, la demanda de particulares cayó un 0,9% en abril pasado, mientras que en los cuatro primeros meses del año el desplome alcanza el 14,9%. Por su parte, las compras de alquiladores mejoraron un 15,4% en abril y acumulan un alza del 6,6% en el primer cuatrimestre de 2008.

El 72% de los automóviles comercializados entre los pasados meses de enero y abril disponían de motor diésel, frente al 28% de gasolina. En los cuatro primeros meses bajaron las matriculaciones en todos los segmentos a excepción del micro (3%) y medio-bajo (0,5%). El descenso más significativo correspondió a todoterrenos grandes (-48,8%), monovolúmenes grandes (-47,7%) y vehículos de lujo (-45,3%).

Revisión a la baja

Ante este panorama, Anfac y Ganvam han decidido revisar a la baja sus previsiones para el conjunto de 2008, ejercicio en el que esperan una caída de las matriculaciones de entre el 7% y el 9%, frente a la anterior estimación que contemplaba un descenso de entre el 2% y el 3%.

Esta revisión a la baja de las previsiones para 2008 se debe al deterioro de la situación económica, a la "importante" caída del consumo privado, a la retirada "inoportuna" del Plan Prever y al endurecimiento de las condiciones para la concesión de créditos, indicó hoy en un encuentro con los medios el presidente de Anfac, Juan Antonio Fernández de Sevilla.

El máximo responsable de Anfac avanzó que las ventas de vehículos comerciales ligeros y de camiones cerrarán 2008 con un descenso "preocupante" superior al 9%, que muestra el deterioro de la actividad económica y, en el caso concreto de los vehículos industriales, el efecto del parón de la construcción.

Ante esta situación el presidente de Anfac ha solicitado una entrevista con el nuevo ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, al objeto de plantearle las necesidades del sector a corto, medio y largo plazo. "Queremos que el Gobierno se tome en serio este sector. No podemos permitirnos perder el tren, porque otros países vienen pisando fuerte", manifestó

Recuperar el plan prever

La primera petición al Gobierno, no sólo de Anfac, sino de las restantes principales organizaciones sectoriales (Aniacam, Faconauto y Ganvam), es la recuperación del Plan Prever. Las cuatro asociaciones han elaborado una propuesta conjunta en este sentido, que han hecho llegar a los ministerios de Economía, Interior, Industria y Medio Ambiente.

Fernández de Sevilla lamentó la "inoportuna supresión" de este programa, y destacó que, como consecuencia de tal medida, la oferta de coches usados de más de diez años ha crecido un 65% en el primer trimestre, de forma que la edad media de estos automóviles se sitúa en 16 años y el precio medio en 700 euros.

El presidente de Anfac también denunció al absentismo injustificado que sufren las plantas españolas de automóviles y que se sitúa en el 7%, lo que equivale a la actividad de una fábrica de 4.000 empleados a tres turnos, es decir, la producción de 300.000 vehículos.

Otro de los aspectos en los que incidió Fernández de Sevilla fue la necesidad de controlar la inflación, pues "el diferencial de un punto o punto y medio con la zona euro afecta a los costes de elaboración y genera una pérdida de competitividad. "Encarecemos entre un 1% y un 1,5% nuestros productos cada año en relación a los que se fabrican en otros países", aseveró.

Además, el presidente de Anfac insistió en que deben mejorarse las infraestructuras para afrontar la desventaja competitiva que generan los costes logísticos por la situación geográfica de España, y pidió al Gobierno que respalde a la industria ante los planes de Bruselas para limitar las emisiones de CO2 de los coches y sancionar duramente a las marcas que superen los máximos.