DRISCRIMINACIÓN

Las aragonesas están discriminadas en accesos a puestos de responsabilidad

Las diferencias salariales entre hombres y mujeres no son directas ya que se deben a que tienen puestos más bajos y que la cuarta parte de las mujeres trabaja a tiempo parcial.

Las aragonesas están discriminadas en el acceso a los puestos de responsabilidad en el mundo laboral, tanto en la Universidad, la empresa o la administración, y sólo un 14 por ciento de los municipios tiene alcaldesa, según pone de manifiesto la publicación "Datos básicos de las mujeres en Aragón 2008".


El informe revela que aunque el salario medio de las aragonesas es de 14.325 euros anuales, un 32,3 por ciento más bajo que el de los hombres, de 21.480 euros, no existe discriminación directa ya que las diferencias salariales se deben a que tienen puestos más bajos y que la cuarta parte trabaja a tiempo parcial.


Así lo ha señalado la directora del Instituto Aragonés de la Mujer (IAM), Rosa Borraz, al presentar el documento elaborado conjuntamente con el Instituto Aragonés de Estadística con el que se pretende conocer la realidad de las aragonesas, que son casi 650.000, un 50,1 por ciento del censo.


La directora general de Política Económica del Gobierno de Aragón, Eva Pardos, ha señalado que con la publicación se quiere difundir las características demográficas y económicas de las mujeres aragonesas ante la aplicación de la Ley de Igualdad.


Así, se recogen datos de población y familia, educación, actividad profesional, salario y renta, hábitos de vida, salud, entorno social, participación, representación y poder de las mujeres en la Comunidad Autónoma.


Del conjunto total, 593.950 son españolas y 55.709 extranjeras, y el 22,5 por ciento tiene más de 65 años, aunque su edad media es de 44,30 y su esperanza de vida de 83,74 años, en ambos casos superior a la de los hombres, de 41,6 y 77,36 años, respectivamente.


Sin embargo, el número de hombres es superior al de mujeres entre los jóvenes, una tendencia que se invierte a partir de los 50 años.


Según recoge el libro, las mujeres extranjeras han elevado a 307.567 el número de aragonesas en edad fértil (15 y 49 años) y el número de nacimientos ha pasado de 9.260, hace una década, a 12.281, en 2006.


En el ámbito de la educación, ha destacado Borraz, en general estudian más mujeres que hombres y ellas los superan en todos los niveles formativos en rendimiento escolar.


En la Universidad de Zaragoza (UZ), el número de alumnos ha descendido en los últimos años pero el porcentaje de mujeres ha aumentado (el 54,9 del total en el pasado curso)


Sin embargo, y aunque las mujeres son mayoría en el profesorado no universitario, excepto en música y danza, sólo representan el 15,6 por ciento de los catedráticos y el 39,4 por ciento de los titulares de la UZ.


Estos datos ponen de manifiesto, según ha explicado Borraz, la discriminación de la mujer en el acceso de determinados puestos, ya que el alumnado es mayoritariamente femenino y los puestos más relevantes están ocupados por el sexo masculino.


También la representación femenina en el ámbito político es inferior a la de los hombres, así el 25,26 por ciento de los concejales son mujeres y sólo el 13,95 por ciento ostenta la alcaldía.


La provincia de Huesca es en la que, de media, participan más concejalas y alcaldesas en la vida municipal.


En las Cortes aragonesas, el 34 por ciento de los escaños son ocupadas por mujeres y sólo cuatro forman parte del Ejecutivo que preside Marcelino Iglesias.


La renta de las aragonesas es un 26,5 por ciento menor que la de los hombres y sus contratos laborales más inestables, mientras que la tasa de actividad femenina (66,75 por ciento) todavía está por debajo de la de los hombres (85,31 por ciento).


Sin embargo en diez años se ha duplicado el número de mujeres ocupadas, que forman el 41,2 por ciento del total, y la tasa de paro se ha reducido en 10 años al 7,26 por ciento.


La cuarta parte de las ocupadas trabaja a tiempo parcial, y de las que tienen jornada reducida, el 35 por ciento la ha solicitado por motivos familiares o enfermedad (sólo el 7,3 por ciento en el caso de los hombres).


Las diferencias salariales en Aragón, del 32,3 por ciento más bajo en las mujeres (en España del 27,5 por ciento), aparecen en todos los tipos de actividad y edad y ambos sexos cobran igual por el mismo puesto, ha destacado Borraz, para señalar que no existe discriminación directa en el sueldo.


Por otra parte, la publicación revela que las mujeres son las que realizan principalmente las tareas del hogar, a las que dedican 27,4 horas a la semana, y el cuidado de personas dependientes y menores de 15 años.


El porcentaje de sobrepeso u obesidad (43,93 por ciento) es inferior al de los hombres (63 por ciento), sin embargo el consumo de alcohol, tabaco y cannabis entre 14 y 18 años es igual.


Las aragonesas opinan que su estado de salud es bueno o muy bueno (67,1 por ciento), pero casi el 90 por ciento va al médico una vez al año, su causa más habitual de fallecimiento son los problemas circulatorios, y mientras que mueren más hombres en accidentes de tráfico a ellas les afecta más el Alzheimer.