MACROECONOMÍA

La economía crecerá menos este año y se recuperará en 2009, según un estudio de PWC

El Consenso elaborado por la consultora especializada limita al 2,6% el crecimiento del PIB en 2008.

Crece el pesimismo económico y todas las proyecciones que se realizan sobre el futuro de la economía española sufren un recorte. Expertos y empresarios que colaboran en el Consenso, encuesta de coyuntura que elabora trimestralmente la consultora PriceWaterhouseCoopers (PWC), han rebajado dos décimas su previsión media de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) para este año.


Los más de 300 encuestados por PWC estiman que el avance se limitará al 2,6%, frente al 3,1% que aún mantiene oficialmente el Gobierno. A ese promedio se llega desde un conjunto de opiniones aún más negativo: cinco de cada diez encuestados prevén una expansión del PIB inferior al 2,5% en 2008. Y ocho de cada diez anticipa que la desaceleración económica se extenderá, si bien será más o menos acusada en función de la marcha de la coyuntura internacional.


La impresión global de los encuestados es que la economía mundial atravesará la peor situación cíclica durante el primer semestre del año y, aunque no descartan que esta situación se pueda prolongar durante la segunda mitad del 2008, no prevén un agravamiento importante de la coyuntura. De hecho, como previsión para 2009, la mayoría de encuestados creen que el crecimiento medio de la economía española se habrá recuperado ligeramente hasta el 2,9%, es decir, de un crecimiento sosegado.


En la misma línea que el Consenso se pronuncia, en lo que concierne al actual ejercicio 2008, la revista británica "The Economist". Sus analistas opinan que la economía española crecerá el 2,4% este año, pero en cambio creen que experimentará un ajuste adicional en 2009, cuando el Producto Interior Bruto tendrá un aumento anual del 2,1%.


Los tipos de interés


El deterioro de las expectativas tiene su contrapartida. Los expertos que participan en la encuesta de PWC creen que el Banco Central Europeo "no tendrá más remedio" que rebajar los tipos de interés a lo largo del año, tomando en cuenta además la fuerte apreciación del euro y la relativa contención de las presiones inflacionistas.


El porcentaje de quienes opinan que la autoridad monetaria moverá ficha antes de junio se eleva al 94% y un 80% cree que los tipos de interés estarán en el 3,75% o por debajo de esa cota a finales de año. En detalle, la mitad piensan que el recorte será de medio punto, para quedar en el 3,5% en diciembre, pero uno de cada tres limita la rebaja a un 'cuartillo' desde el 4%.


Los precios se irán enfriando, pero muy gradualmente. Tras alcanzar un techo del 4,6% el pasado marzo, la inflación caerá hasta el 3,94% en junio y descenderá al 3,5% a finales de año, en opinión de la mayoría de los participantes en el Consenso. Pero todavía uno de cada cuatro encuestados sostiene que el IPC anual podría estar entre el 3,6% y el 4% a finales del ejercicio.


Aunque los precios siguen al alza, nadie se considera culpable de esta trayectoria. Apenas el 16% de los empresarios consultados reconoce que piensa aplicar aumentos a los bienes o servicios que factura.


Situación internacional


En el ámbito internacional, los encuestados para el Consenso elaborado por PWC consideran especialmente negativa la situación de Estados Unidos, aunque creen que podría estar atravesando ya la peor fase del ciclo. Los principales riesgos para la economía derivan de una mayor desaceleración de Estados Unidos (72%) y la devaluación de activos como la vivienda, según el 59,4% de los panelistas.


Los expertos se muestran además escépticos sobre la eficacia de las medidas de estímulo fiscal y monetario puestas en marcha en Estados Unidos para hacer frente a la crisis. Un 77% cree que "limitarán algo" esta crisis y un 13% considera que tendrán "poco" impacto. La mayoría de los encuestados prevén una recesión corta y moderada en Estados Unidos, y una moderación del crecimiento en la UE, Asia y Latinoamérica.


Además, pronostican que el dólar seguirá depreciándose frente al euro y siete de cada diez creen que la crisis actual era predecible hace un año y la práctica totalidad consideran "elevada" o "muy elevada" la responsabilidad de los reguladores bancarios en la actual crisis. En todo caso, la mayoría creen que las mejores medidas para paliar la crisis son las inyecciones de liquidezal sistema financiero, seguida de una bajada de impuestos y un recorte en los tipos de interés.