Al parecer el plan de rescate a Grecia junto con los resultados empresariales hicieron rebotar este jueves las fuertes caídas del parqué madrileño en los últimos dos días y el Ibex subió un 2,69 por ciento, situándose en la cota de los 10.441 puntos. Tan sólo cinco valores terminaron la sesión en negativo, el que más cayó fue Grifols con un 3,04 por ciento.

La Bolsa de Madrid amaneció con tímidas ganancias, después de que Standard & Poor's asegurase tras rebajar la calificación española que , la deuda tiene buena calidad. A los pocos minutos de iniciar la sesión, el mercado comenzó a celebrar los positivos resultados presentados pro buena parte de las compañías que cotizan en el Ibex y éste llegó a superar en algunos momentos los 10.500 puntos.

De este modo, el selectivo puso fin a la sangría de los dos últimos días en los que se dejó un siete por ciento y los inversores comenzaron a recuperar la calma, a pesar de que en algunos momentos el ánimo flaqueó y el selectivo fijo mínimos en los 10.138 enteros. Sin embargo, el acuerdo que están a punto de cerrar la Comisión Europea, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Central Europeo (BCE) para ayudar a Grecia, pudo evitar el desastre de días anteriores.

No obstante, cinco valores cerraron en negativo: Grifols (-3,04%), ArcelorMittal (-0,87%), BME (-0,54%)--su junta general de accionistas aprobó este jueves la distribución de un dividendo extraordinario de 31 millones de euros el próximo 14 de mayo--, Indra (-0,17%) e Iberdrola Renovables (-0,14%).

Entre los mayores repuntes del día se situaron Gamesa (+4,73%), Banco Popular (+4,32%), Telecinco (+4,23%), Repsol YPF (+4,12%), Sacyr Vallehermoso (+4,11%), Enagás (+4,07%) y Banco Santander (+3,97%). BBVA, por su parte, avanzó un 3,22%, por delante de Telefónica (+1,76%), Banco Sabadell (+0,92%), Bankinter y Banesto (+0,75%).

En general, la senda española se extendió al resto de plazas europeas, aunque con crecidas menores a la de Madrid. Así, Paris repuntó un 1,42%, seguido de Francfort (+1%) y Londres (+0,56%), todos ellos influidos por Wall Street.

Mientras, en el mercado de divisas, el euro mantiene sus posiciones frente al dólar, y al cierre de la sesión bursátil el cambio entre las dos monedas quedó fijado en 1,3240 unidades.